A lo Zenón … La Comisión de Disciplina de la Armada, frente al petitorio del Presidente Rafael Correa para que investigue y sancione la conducta de cierto oficial en servicio activo que dijo que el presidente debe “dejar de mentir”, resolvió “Inadmitir a trámite”, pues dizque no es su superior militar. Novísima teoría que hace méritos para el museo del disparate.
Tal acto administrativo es carente de lógica elemental -no digamos jurídica-, de inteligencia, de sindéresis, de coherencia, contradictorio consigo mismo; en fin. La Constitución dice que el Presidente es la máxima autoridad de las FF.AA. y de la Policial Nacional.
En ese marco de arbitrariedad, hizo bien Rafael Correa en presentar una acción de protección que es eminentemente de carácter constitucional y que se encasilla en el respeto a la institucionalidad del Estado, pues será la administración de justicia la que deberá pronunciarse en defensa de la Constitución y de la ley; amén del sentido común.
Todo lo señalado se da en el contexto del debate sobre el sistema de seguridad social del que, por mandato constitucional, forman parte el ISSFA y el ISSPOL; y de ciertas reformas que se harían y de las que algunos sostienen de que si no hay consenso, “se lo archive”. Poner orden en el país no es atentar contra ninguna institución pública; peor todavía buscar su desaparición como han sostenido ciertos mediocres de la oposición al Gobierno de la Revolución Ciudadana.
Todas y todos somos iguales ante la ley; no se debe tolerar favoritismos absolutamente para nadie.