Es el requisito sine qua non para que un funcionario público ejerza ejemplarmente su función, y no como en la década perdida que, en su lugar se sentó un precedente indigno por parte de algunos ex funcionarios públicos, quiénes aprovechando de su posición se enriquecieron con base en coimas derivadas de la serie de contratos que suscribieron, en teoría para beneficio de nuestro país.
Pero que a la hora de la verdad, han sido todo lo contrario: obras innecesarias o, sobredimensionadas, mal construidas y a precios sobrevalorados.Es incomprensible, que una persona a la que la sociedad le ha dado la oportunidad para que se realice sirviendo a la misma, con el fin de llevar al país hacia un futuro mejor, haya hecho lo contrario, traicionando así, la confianza, la esperanza del pueblo, llevando a cabo actos indignos, tales como: la adquisición de los helicópteros Dhruv denunciada por el ex Comandante General de la FAE y que debido a sus falencias ellos mismos se auto destruyeron.
Los malos contratos suscritos para la explotación y comercialización del petróleo. La reparación y actualización de la Refinería de Esmeraldas. La iniciación de la Refinería del Pacífico. La construcción de la Ciudad del Conocimiento, Yachay, que da pena ver la obra mal construida e inconclusa y sin futuro. El alto costo de las carreteras. La construcción de los aeropuertos que están sin uso. La compra de patrulleros para la Policía Nacional, que al momento están almacenados, sin uso.