Es claro como a muchas personas el juego de números los confunde cada vez más, nos hemos vuelto indolentes ante la necesidad humana mientras que los números fríos e insensibles marcan la pauta.
El 6 de marzo leí una carta que se denominaba Terapia Intensiva, en la que haciendo un simple juego de suma y resta se indicaba como “pérdida” el resultado de lo que ingresó versus lo que gastó el IESS. La “pérdida” a la que hace mención en el fondo de pensiones, son las jubilaciones (que se pagan completas y mensualizadas) de los ahorros que los afiliados en nuestra vida activa realizamos.
La “pérdida” a la que hace mención en salud, corresponde a las millones de atenciones médicas, operaciones, medicina, y prestaciones económicas por enfermedad o maternidad. Para mí la pérdida más grande ha sido de humanidad en la que las atenciones en salud y el pago de las pensiones se consideran una “pérdida”. Las pensiones jubilares y la atención en salud no son una “pérdida”, sino una ganancia en la que se invierte.