Resulta inexplicable e inaudito, por la cantidad de desacuerdos y contradicciones que han surgido entre funcionarios de este Gobierno y el propio Presidente de la República, sobre un tema tan trascendental, como es el tratamiento precisamente de los tratados comerciales, llámenseUnión Europea o Tratados de Libre Comercio.
El manejo de estos temas, a cargo de personas que no los conocen, como son el Canciller y Vicecanciller de la República, que deberían renunciar a sus cargos, si les queda dignidad, es verdaderamente preocupante. Causa pena y risa como el uno le desautoriza al otro y los dos a su vez quedan finalmente “desautorizados” y en ridículo por el mandamás; desoyendo además, a voces autorizadas en esta materia, como son el titular del Comité Empresarial Ecuatoriano y el Viceministro de la Producción.
Mientras otros países de la región, que firmaron hace rato largo acuerdos comerciales, avanzan firmemente hacia su bienestar y progreso y un mejor mañana para sus pueblos; nosotros, con estos incapaces que se empecinan en causarle daño al país, seguimos “firmemente” estancados en el atraso y en la más absoluta pobreza.
¡Pero claro, la revolución ciudadana (si es que existe), está imparable y marchando… como el cangrejo y hacia el despeñadero cogidos de la mano de estos sabios y genios de la política y economía ecuatorial!