En magna sesión solemne, la centenaria Academia Nacional de Historia presidida por Jorge Núñez, incorporó a la categoría de académicos de número a Diego Moscoso y a Leonardo Barriga.
Guardando la sabia tradición, por méritos intelectuales, fueron incorporados por los máximos directivos del cenáculo ecuatoriano del pensamiento.
Diego Moscoso Peñaherrera presentó el libro “El honor primero.
Los duelos de honor en el Ecuador”, prolija investigación que le tomó más de 4 años y que confirmó aquello de que para construir el presente hay que estudiar el pasado.
El subdirector Franklin Barriga hizo la presentación de la obra, a través de un sucinto y bien logrado resumen que involucró al Quijote.
Leonardo Barriga agradeció al director de la Academia, Jorge Núñez; leyó su ponencia sobre Ignacio Flores de Vergara, “quiteño nacido en Latacunga” y que ocupó la presidencia de la Real Audiencia de Chacras, ubicada en el alto Perú de entonces.
El acto fue un deleite espiritual y académico que amortiguó el intenso frío imperante en la capital.