Las autoridades del IESS temen reconocer el derecho a la jubilación patronal proporcional que los exservidores reclamamos. Hacen cálculos y saben que una pensión mensual de 50 dólares impaga durante 160 meses multiplicada por los cientos de perjudicados representa una cantidad que bordea los 10 millones de dólares.
Nuestros inefables burócratas han perdido la visión del bosque por concentrar su atención en las ramas de los árboles.
Una alternativa para solucionar este asunto y que no implica egreso alguno de dinero es la siguiente: que el Consejo Directivo disponga los cálculos actuariales pertinentes para que la Cuenta Individual de los exservidores sea compensada con los valores que el IESS-Patrono nos adeuda. Las nuevas disposiciones sobre afiliación voluntaria posibilitan esta solución y finalmente se haría justicia.