Todos los gobernantes de América.”… están pasando de la prudencia a la complicidad ante la gravísima situación de Venezuela, opinan los expresidentes que estuvieron en la Cumbre de las Américas en Panamá. Hagamos una comparación: si en la casa de su vecino se oyeron gritos de terror, palizas, gente encadenada. etc., etc. ¿sería lógico que la comunidad del barrio vea indiferente este cuadro de terror y no haga nada por ayudarles?, No. Sería absurdo, ilógico. Sería una falta imperdonable de humanidad. Esto está pasando en Venezuela. Se oyen sus gritos de terror ante la indiferencia de los países vecinos.
El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, fue muy claro en su discurso. Entre otras cosas dijo: “ (…) los mandatarios aquí reunidos sabemos que hemos sido elegidos por un período determinado, en el cual tenemos que actuar con lógica, prudencia, dando estabilidad y prosperidad a nuestros pueblos”. El venezolano Nicoás Maduro no cumple ninguno de estos requisitos .
Panamá es hoy en día el mayor centro de negocios internacionales. Es un país exitoso y hermoso. Pero para llegar a esto tuvo que intervenir Estados Unidos de Norteamérica y liberarles del dictador que les gobernaba, el narcotraficante general Manuel Antonio Noriega, quien les tenía sumidos en la tragedia, el abuso y el terror, al igual como Venezuela se halla hoy en día.
Claro que nos acordamos cómo terminó Noriega. Nada bajo el cielo queda sin castigo. La justicia divina es implacable, no se libra nadie.