Es inadmisible que haya ciertos funcionarios públicos de menor jerarquía que se crean eternos, y afirmo con conocimiento de causa pues se trata de un fenómeno sociológico ecuatoriano que deja mucho que desear cuando existen un sinnúmero de personas probas que pueden sucederle a estos mini monarcas de la burocracia seccional, y gracias a Dios puedo aseverar que cuando ejercí el cargo de asistente en la gobernación, logré realizar varias obras que justificaba mi presencia en dicha dependencia pública y eso les consta a quienes serví, sin ningún interés que permita pensar, pero es realmente lamentable que existan autoridades seccionales que permitan una eterna vida de eternos burócratas que no tienen tiempo para servir, que delegan a la autoridad máxima un deber que ellos deben cumplir, cómo entenderles a estos mediocres que fungen de servidores públicos y que a la hora de la hora: están muy ocupados.
Exijo a las autoridades seccionales que ejerzan mayor oxigenación en funcionarios de menor jerarquía que por ser directores piensan que van a dirigir el respectivo departamento por siempre.
Hay un sinnúmero de personas capacitadas para ejercer un cargo público pero parece que en ciertos casos tienen el apoyo del jefe. Y seguramente el jefe no sabe cómo le hacen quedar mal cuando hasta un usuario es convocado por la asistente y no aparece la asistente ni el burócrata y cuando emerge de la nada: delega al máximo funcionario de mayor jerarquía. La pregunta es: ¿Sr Alcalde cuando los guayaquileños seremos considerados por un director de cultura que lo delega usted para cumplir un deber que debió ser cumplido por él? No entiendo por qué se apoya funcionarios ineptos que nada hacen por servir a la comunidad. Exijo una explicación ante la pérdida de una hora que solo se justificó al conocer a una comunicadora
Los funcionarios públicos deben servir no delegar el deber de servir más todavía cuando son funcionarios de menor jerarquía.