Jesús predicó la piedad y la misericordia, el Catecismo Católico dice que los animales son criaturas de Dios que le dan gloria y que les debemos aprecio. Cuántas razones habrán para que la Iglesia Católica no prohíba esta taurina tortura y que usen nombres santos para estas prácticas sangrientas: Jesús del Gran Poder y otros.
El Alcalde hizo campaña por la Constitución que garantiza el respeto a la voluntad popular. ¿Qué intereses hay en él y en el Concejo para que traicionen la Constitución y a Quito donde ganó la pregunta 8 y propicien este negocio taurino? Estas ‘fiestas sin violencia’, ocultan su real rostro al mantener esta costumbre violenta. ¿Por qué el Presidente que propició la consulta e hizo campaña con el Alcalde por la pregunta 8, ante este desacato de la mayoritaria voluntad quiteña, no hace nada y su silencio colabora con el negocio taurino?