La primera dictadura militar se instauro en julio/1963. Del primero al último día la universidad ecuatoriana mostró su oposición frontal al totalitarismo. Las cárceles se llenaron de estudiantes.
En febrero/65 ingreso al penal García Moreno y me ubican, frente a la celda en la cual fue asesinado Eloy Alfaro. Recuerdo la “bienvenida” de conocidos ciudadanos de distintas banderías y regiones: Abdón Calderón Muñoz, Carlos Palacios Sáenz, Guillermo Bossano, Juan Viteri Durán, Pedro José Arteta, Aurelio Dávila, amigos y maestros entrañables. Todos han muerto. Declarados en huelga de hambre nos liberaron. Yo volví al activismo y a la cárcel.
Los estudiantes creímos que otra huelga nos liberaría; mas el resultado fue ser enviados a Galápagos en avión militar, vigilados por paracaidistas; de Baltra a San Cristóbal en el destructor ‘Velasco Ibarra’; la dictadura por aire, mar y tierra.
Era marzo/65. La universidad clausurada se abrió y exigió el retorno de sus profesores y estudiantes confinados. De aquel tiempo vale consignar que mi generación cumplió con su deber hace medio siglo y en la mejor línea del mandato de Montalvo dio batalla tenaz a la opresión.
Los confinados que retornamos: Telmo Hidalgo (+), Lautaro Gordillo, profesores; estudiantes: Jorge Viteri (+) Milton Burbano, Washington Bonilla, Pablo Guayasamín y Édgar Molina. Era mayo 23/1965.