Ante los acontecimientos de corrupción recientemente descubiertos, presuntamente cometidos por parte de ex funcionarios y otros, el actual gobierno aparentemente desea castigar a los autores intelectuales y materiales; lo que felicitaríamos los ecuatorianos, ya que éstos y muchos otros fueron reiteradamente denunciados durante la década pasada y se los ignoró. El Presidente Moreno ha nombrado una Comisión Anticorrupción con miembros cercanos al partido de gobierno, esto genera algo de desconfianza en la transparencia de su actuación pero en ellos (quienes conforman la Comisión) está el desvirtuar esa desconfianza.
Algo que, sugiero, sea analizado por esta Comisión, son las denuncias que a su tiempo existieron y las dudas, hasta indignación que aún persisten sobre resultados obtenidos, uso del dinero recibido para el proyecto Yachay, los ‘latisueldos’, docencia por internet desde el extranjero, viajes de sus funcionarios y más “perlas” que se los “acusó”. Aquí considero que se podría encontrar mucho para ser investigado por los entes competentes. Esperemos (¿?)…