Un líder del cual su pueblo se sienta orgulloso. Un líder respetado dentro y fuera de las fronteras de su país. Un líder que sume, no que divida y confronte. Un líder honesto, que escoja a sus colaboradores por su honestidad y afán de servicio. Un líder que respete a todos los ciudadanos, las funciones independientes del Estado, la libertad de expresión en todos sus aspectos. Un líder que garantice la seguridad, la salud, la educación para sus ciudadanos. Un líder que tenga la capacidad de reírse de sí mismo. Un líder que acepte las críticas. Un líder que, junto con sus colaboradores, encuentre los caminos hacia la construcción de un país más justo, sin copiar ideologías fracasadas hace mucho tiempo en todos los países donde intentaron aplicarlas y que ha llevado a sus pueblos a la miseria. Un líder que logre conquistas para los trabajadores, que favorezca la educación y especialización de los mismos y demande de ellos eficiencia. Autoridades que sean conscientes de que recibieron un mandato, por un corto tiempo, de un pueblo que depositó en ellos su esperanza de cambios y de trabajar para lograr un mejor futuro para las nuevas generaciones. Autoridades que no vean en ese mandato su oportunidad para eternizarse o enriquecerse. Autoridades que finalmente estarán obligadas a rendir cuentas a ese pueblo que las eligió. Esto y más es All you need Ecuador.