El presidente Lenin Moreno, en vez de la consulta popular, debería proponer un gobierno de transición a fin de que Venezuela salga de la narco-dictadura de Maduro. Esa debería ser la propuesta no sólo del Ecuador sino de todos los países democráticos de América Latina. Para conseguir ese objetivo se deberían tomar algunas medidas: primero, aplicar la Carta Democrática de la OEA; segundo, suspender toda relación comercial y financiera que los países tengan con Venezuela. Acordar con los EE.UU. y la Unión Europea y otros países para que no adquieran el crudo venezolano y suspender toda transacción con el país caribeño.
El Ecuador y el resto de los países latinoamericanos no se pueden quedar impávidos frente a lo que pasa en Venezuela donde la dictadura madurista ha masacrado a decenas de jóvenes, ha destruido el país: en lo económico, político, social y hasta en lo cultural. Moreno ha dado pruebas de ser un hombre democrático; y si se desmarcó valientemente del correísmo, es hora de que se desmarque de las dictaduras comunistas de Venezuela y de Cuba. Hoy cuenta con un excelente profesional al frente de la Cancillería ecuatoriana.