Mucho por hacer. ¡Que bien! Oportunidad laboral para toda la población. Se mira el horizonte con optimismo y esperanza convencidos que es y siempre va a ser mejor. Por el contrario, varios países conocidos o llamados de “primer mundo” o “desarrollados”, también aquí se debería analizar bajo qué parámetros merecen ser nombrados o apreciados de esa forma, existe recesión y desocupación sobre todo en jóvenes universitarios graduados y muy preparados que emigran para subsistir.
En un país por desarrollar muchas cosas buenas, con recursos naturales extraordinarios, regalo del Creador, guiado con eficacia en el “arte de gobernar” y en primer lugar la voluntad positiva de sus habitantes, la desocupación desaparece.