Sin consenso ciudadano se aprobó la ruta del Metro por el corazón del Centro Histórico de Quito. Hoy están preocupados por lo que pueda pasar por dicha construcción, que afectará a las propiedades de las calles Benalcázar y García Moreno y otras, pues no podemos olvidar que la mayoría de estas construcciones están hechas con adobe y materiales en desuso. La información oficial señala que el Centro Histórico de Quito está construido no sobre una roca sino sobre tierra frágil.
El 27 de enero en El Comercio hay una publicación que dice: “Arias recuerda que la ley es estricta en relación con el deterioro o pérdida de bienes patrimoniales”. La persona que dañe o deteriore, destruya total o parcialmente bienes pertenecientes al patrimonio cultural del Estado (…) sin importar el derecho real que tenga sobre ellos, será sancionada con pena privativa de libertad, de uno a tres años… según el art. 237 del Código Orgánico Integral Penal.
¿El COIP se aplicaría contra los presuntos dañadores del Centro Histórico por causa de la construcción de la ruta Metro Quito? ¿Estos dañadores, tendrán pena de cárcel como se amenaza aplicar a los propietarios?
Expresamos esta inquietud porque a última hora se está notificando a los propietarios de este sector emblemático y colonial de Quito, un acta sobre el estado actual de las edificaciones con firma del Consorcio Línea 1 del Metro de Quito y de la Empresa Pública Metropolitana Metro de Quito, cuando antes de la construcción, publicitaban que no afectaría a ninguna propiedad y que esta construcción era segura. Transparenten la información con solvencia técnica.