El día de hoy fui a sacar el pasaporte y quedé sorprendido de lo fácil que fue. La atención fue muy amable, el tiempo de espera sumamente reducido. Y lo más increíble: no hubo “colas”. El procedimiento es muy preciso y claro. En pocas palabras fue “todo excelente”. A comparación de algunos años atrás, cuando obtuve mi pasaporte anterior o el primero, yo diría que el servicio ha mejorado radicalmente. Con las personas que conversé y los comentarios que escuché, puedo decir que muchos usuarios estuvieron sumamente complacidos con el servicio al cliente que el Ministerio de Relaciones Exteriores ofrece a los ciudadanos; que queremos renovar o sacar el pasaporte por primera vez. Es una lástima que no pueda decir lo mismo del SRI, en donde la aglomeración de la gente que paga los impuestos es abrumadoramente perversa y desalentadora para seguir pagando impuestos. Lo engorroso del pago de impuestos es totalmente opuesto a la facilidad de trámites en la Cancillería. Felicitaciones a unos y “procuren mejorar para otros”.