En cuanto a la democracia. Es difícil consensuar con todo el pueblo y es extremadamente difícil tratar de que todo el pueblo piense de una u otra manera. Por lo tanto, se generan disputas y conflictos de intereses e ideales, que hay que saber sobrellevarlos con el diálogo y la comprensión de ambas partes; siempre buscando la mejor solución a los aprietos, en donde hay que anteponer al país y al interés colectivo y después al interés personal. Es decir, si tú criticas la propuesta presentada por otra persona, para que se cumpla esta democracia, debes exponer por qué no te gusta esa propuesta y presentar una mejor; para así someter a debate y análisis y buscar la solución más asertiva. Este modelo de democracia debe funcionar en todas las partes del mundo. Lastimosamente, la mayoría de sociedades no lo aplica y ahí comienzan las guerras intestinas políticas, económicas, culturales y sociales. “Cambiemos nuestra forma de resolver conflictos; anteponiendo el interés colectivo, después el interés individual y de esta manera hallaremos un desarrollo más evidente en el país”.