ASFIXIANTE PUBLICIDAD

Mi abuela decía sabiamente. “Bueno es culantro pero no tanto”.

Y es que hoy el Estado se ha convertido en una agencia de publicidad que bombardea en forma atosigante, al punto de obligarnos a utilizar el control remoto y cambiarnos de canal o emisora al menos unas 10 veces por hora.

Si no fuera por el control remoto nos veríamos obligados a apagar la radio o TV para detener este fastidioso, inútil y obsesivo bombardeo de publicidad oficial aprobada por la CNE.

Probablemente el estado crea que lo está haciendo bien, pero mi opinión es que ya nadie le pone atención a tanta fastidiosa basura.

Al menos mi basurero ya no tiene capacidad para tanta publicación inútil.

Señores burócratas: paren por favor y usen en algo útil los recursos y permítanos disfrutar de los medios en paz.

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