La Silla Vacía

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‘La imaginación al poder’

El título de este micro ensayo puede parecer una metáfora. En efecto, pensé –en principio- en los auto candidatos o precandidatos que aparecen en el escenario electoral y que luchan por captar el poder. Y la historia comienza a repetirse, a no ser por unas ‘intrusas’ que van a tener un protagonismo inusual: las redes sociales. ¿La imaginación al poder? Una invitación.

Para iniciar esta conversación textual les informo que encontré un aniversario verdaderamente excepcional: los cuarenta y ocho años de la revolución de Paris, de 1968, que marcó a mi generación.

• Los jóvenes tomaron la palabra
¿Qué pasó entonces? La década de los sesenta fue muy nutrida –y en ocasiones divertida- en acontecimientos mundiales, que nos quedan en los recuerdos: la revolución cubana, la reforma universitaria, la primavera de Praga, el rock y Los Beatles, el concilio Vaticano II, la guerra de Vietnam, la Teología de la Liberación, la revolución sexual…

Uno de los hechos más relevantes fue el movimiento estudiantil de Paris y otras ciudades europeas, que movieron el estatus quo, con Cohn Bendit a la cabeza. Los jóvenes tomaron la palabra, formaron barricadas, las paredes se llenaron de grafitis que contribuyeron a la revolución simbólica más significaba del siglo XX.

Allí se dijo: ‘La imaginación al poder’, ‘Prohibido prohibir’, ‘Seamos realistas, pidamos lo imposible’… que más que simples frases fueron el contenido de una contra cultura que surgió para transgredir el ‘orden’ que se había establecido en virtud de una lógica que privilegió el consumo –de ideas y de productos-, en aras de un capitalismo salvaje. Herbert Marcuse y ‘El hombre unidimensional’ cubrieron de imaginación una protesta llena de autenticidad y desencantos, que abrió espacios para la irreverencia ante la falta de alternativas serias para el cambio.

• La irrupción de las redes sociales
Ahora estamos en el siglo XXI. Y la imaginación sigue vigente. Veamos por qué. Pocos futurólogos y adivinos advirtieron la llegada de las redes sociales, en el contexto de la revolución apenas comenzada de las tecnologías de información y comunicación, que han extendido sus conexiones, eliminado las fronteras físicas, superado los paradigmas y rearmado el andamiaje de todas las ciencias, de todas las culturas, de todas las economías y políticas, en nombre de la denominada sociedad del conocimiento.

Entre ellos es justo reconocer al sociólogo canadiense Marshall McLuhan, creador del concepto de ‘Aldea Global’, en los libros ‘The Gutenberg Galaxy: The Making of Typographic Man’ (1962), ‘Understanding Media (1964), y ‘Guerra y paz en la Aldea Global’ (1968). También merecen menciones Alvin Toffler, recién fallecido, y sus magníficas obras ‘La tercera ola’ y ‘El shock del futuro’, así como Giovanni Sartori y su ‘Homo Videns’, y Manuel Castells, español, el quinto académico de las Ciencias Sociales más citado del mundo, sobre las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) y sus libros ‘De la sociedad de la información a la sociedad informacional’ y ‘El Estado Red’.

Las redes son, en efecto, nuevos espacios de la política, de la economía y los aprendizajes donde se cuecen las estrategias de la gobernabilidad, hoy llamadas digitales, que se sustentan en códigos, contraseñas, usuarios, antivirus y vacunas contra la novísima infiltración de ‘papers’ que saturan las plataformas informáticas de dinero electrónico.

Las redes sociales –hay que reconocerlas- tienen en su haber el sustento a una ciudadanía inédita –la digital-, que aúpa a personas de buena voluntad y también a indignados, en los cuatro puntos cardinales del planeta. Las plataformas electrónicas están ahora de moda, y los programadores son los nuevos gerentes de la innovación que, ciertamente, no tiene fronteras, aunque ya han aparecido las regulares como en China, Cuba, Corea del Norte y otros países.

• El nuevo poder
¿Por qué regular a las redes sociales? Es la pregunta. La posible respuesta es que molestan al poder o los poderes legales o fácticos constituidos. Las redes sociales convocan a ciudadanos, y de pronto las calles son escenarios de expresiones del poder o contra poder que se gestan a través de las conexiones digitales.

Este nuevo poder es el resultado, en gran medida, de la imaginación, que se traduce en la búsqueda de alternativas genuinas, frescas y actuales, espontáneas y no contaminadas por los intereses, o mejor: articuladas por el interés más olvidado por los políticos tradicionales: el bien común.

• Invitación
Les invito a releer ‘1984’, de George Orwell, que me marcó para toda mi vida. ‘La historia de 1984 se lleva a cabo en un 'futuro' en el cual el partido en poder es totalitario y omnipresente, controla absolutamente toda la información que llega al pueblo, y no solo eso sino que incluso la manipulan constantemente con el fin de mantener bajo un estricto nivel de control a la opinión general’.

‘Para ejercer el poder utiliza una estructura basada en 'Ministerios' cuyo curioso nombre se refiere a exactamente lo contrario de las labores que desempeñan: el Ministerio del Amor, que se encarga de los castigos, torturas, represiones, etc.; el Ministerio de la Paz, encargado de todo lo relacionado con la guerra; el Ministerio de la Abundancia, que trabaja la economía y racionalización de los bienes; y, el Ministerio de la Verdad: Manipulación / alteración de documentos a discreción’.

El partido es representado por la figura de ‘El Gran Hermano’, persona imaginaria (o no) capaz de observar y escuchar absolutamente todo. Los tres lemas que representan al partido y que también es necesario invertir para entender su significado son los siguientes’:

1. ‘La Paz es Guerra. Mientras haya guerra con otro país, la gente tendrá suficiente miedo como para revelarse contra el partido, por lo tanto habrá paz’.

2. ‘La Libertad es Esclavitud. Si siempre has sido esclavo no conoces otra cosa por lo tanto a tus ojos eres libre’.

3. ‘La Ignorancia es la Fuerza. Si el proletariado es ignorante no tiene motivos para cuestionar al partido, por lo tanto, el partido es fuerte’.

Fuente: http://monillo007.blogspot.com/2015/01/1984-george-orwell-breve-analisis-desde