Aunque parezca broma, estudios demuestran que el luto por la muerte de un personaje ficticio es algo real. Foto: Flickr.

Aunque parezca broma, estudios demuestran que el luto por la muerte de un personaje ficticio es algo real. Foto: Flickr.

El luto por los personajes de ficción sí existe

Aunque parezca broma, estudios demuestran que el luto por la muerte de un personaje ficticio es algo real. Foto: Flickr.

Piensa en uno de tus personajes favoritos, puede ser de una serie de televisión o un libro. ¿Lo tienes?, listo, ahora imagina que muere. Los productores finalizaron su contrato, los guionistas no le escriben más líneas y no volverá a aparecer en la pantalla.

Ese sentimiento que surge ahora ya lo han vivido muchos seguidores de series de televisión. Las muertes de Ned Stark (‘Juego de Tronos’), Beth (‘The Walking Dead’) y el más reciente Derek Sheperd (‘Grey’s Anatomy’) han generado ese nudo en la garganta y tristeza en los fans. Pero tranquilos, el luto por esa persona que no existe- por más raro que suene-es algo totalmente normal.

Eso fue lo que demostró un estudio realizado en el 2014 por la American University. Este asegura que “los más fanáticos experimentan un duelo y dolor similar al que sienten cuando fallece una persona amada real”. Y empiezan las preguntas, ¿y ahora qué va a pasar con la serie? Otros prefieren pensar que el personaje volverá la vida, aunque muchas veces eso no pasa para nada.

María Sol Garcés, sicóloga clínica y master en neurociencia, explica que “el duelo es un proceso vital y esencial del ser humano que se da en base a la creación de vínculos”. Este proceso se vive en cinco fases: la negación, la ira, negociación, depresión y, eventualmente, llega la superación.

¿Por qué duele que un personaje ficticio se muera?, bueno según el estudio, “la televisión llena y sostiene lazos sociales y culturales. Las series son especialmente poderosas porque se desarrollan con el tiempo, dándoles a los televidentes una oportunidad para pensar y discutir sobre los personajes con otros seguidores”. De hecho, gran parte de los comportamientos emergen de las series para convertirse en parte de nuestras conversaciones cotidianas.

Garcés está de acuerdo con esta postura, ella afirma que los seres humanos "tenemos estructuras a nivel cerebral que están especializadas en los procesos empáticos y permiten generar vínculos con ‘el otro’ por medio de la comprensión de sus estados emocionales". Así, con el pasar de los años, adquirimos experiencia.

Pero es imposible que una persona experimente todo en la vida. Ahí es cuando entran las series y las películas convirtiéndose en un medio para comprender los estados emocionales de otras personas. “Aunque no están pasado en realidad, lo que haces es sintonizarte y poder percibir la emoción del otro”, explica Garcés.

De esta forma, para algunos los personajes de las series se vuelven seres cercanos, como lo es un amigo. Y si el programa es bueno, lloran y se alegran con ellos. Todo depende de cómo los fanáticos se ‘llevan’ con la serie y si su muerte fue trágica e inesperada.

Y, como en la vida real, estos deprimidos fanáticos buscan a otros para comentar la muerte. Según la profesora Christel Rusel- quien dirigió el estudio de la American University- juntos “buscan formas de recordar los buenos tiempos cuando el personaje todavía vivía”.

Así que, si eres seguidor de alguna serie de televisión y uno de tus personajes favoritos se muere, no te sientas mal. Te duele porque en algún momento te reflejaste en ese ser ficticio y de alguna manera significó mucho para ti. Además, en algún lugar del mundo hay alguien que se siente igual que tú.