En bailoterapia se utilizan espejos para que las personas entiendan y puedan imitar movimientos y posiciones. Foto:Archivo EL COMERCIO

En bailoterapia se utilizan espejos para que las personas entiendan y puedan imitar movimientos y posiciones. Foto:Archivo EL COMERCIO

Los espejos de los gimnasios no están de adorno

Los entrenadores también pueden observar el trabajo de las personas que participan en las clases. Foto: Archivo EL COMERCIO

Si eres de esas personas que frecuenta gimnasios seguramente te habrás percatado de que hay espejos en la mayoría de ellos . Estos elementos no son parte de la decoración, tampoco sirven únicamente para admirar los músculos y criticar los gorditos. Pero su existencia tiene una razón de ser.

Entonces, espejito, espejito…¿qué haces en mi gimnasio? Según el entrenador Juan Carlos Espinosa, la idea es que las personas se fijen en la técnica, en la forma y en su postura cuando hacen los ejercicios. Eso no quiere decir que no se puedan fijar en cómo avanza la tonificación de su cuerpo, no se sientan mal si de vez en cuando se dan una mirada para sentirse contentos con los resultados que obtuvieron.

En bailoterapia se utilizan espejos para que las personas entiendan y puedan imitar movimientos y posiciones. Foto:Archivo EL COMERCIO

Los espejos suelen aparecer en sitios donde se realizan pesas. Paúl Zamora, fisicoculturista, piensa que esto ayuda a motivar a los deportistas. “Si te ves bien te dan ganas de seguir trabajando para mejorar”. Pero no es solo vanidad. Al verse en el espejo es más fácil encontrar las cosas que se deben mejorar como no doblar la espalda, apoyar mejor los pies, etcétera.

Los espejos sirven en el levantamiento de pesas para observar la técnica y la postura. Foto: Patricio Terán/EL COMERCIO

Los espacios donde se practica yoga, bailoterapia, aeróbicos, zumba, y otros de similares características requieren de una imitación de movimientos y posiciones. La utilidad de los espejos en estos lugares es que sea más fácil lograr este objetivo.

Algunos gimnasios prefieren no incluirlos en sus instalaciones. En Curves, por ejemplo, es una política empresarial que no existan espejos. Para la entrenadora Belkys Briones, la idea es que las mujeres que asisten se concentren en el ejercicio y no se distraigan con la imagen.

En los box de crossfit no existen espejos. La idea es que los deportistas se concentren en los ejercicios. Foto: Archivo EL COMERCIO

Otros lugares de entrenamiento tampoco los tienen. Los box de crossfit, por lo general, carecen de espejos. “Tu ego se queda en la puerta” es la explicación que dan algunas páginas especializadas. La idea es que las personas se concentren, la imagen es lo de menos.