El alimento de los perros debe ser variado para cumplir con el aporte de nutrientes necesarios. Foto: Archivo EL COMERCIO
Para muchos, las personas que comen carne tienden a ser más temperamentales que las que no lo hacen, por toda la carga energética que absorben al ingerir un animal muerto.
En los animales, la realidad no es muy distinta. Dar carne cruda a un perro para que se vuelva más agresivo y despierte su lado más salvaje, es una de las creencias populares.
Su gusto por el sabor de la carne sin cocinar y sus ganas de sangre fresca lo convertirán en un vampiro que atacará a otros animales y a sus dueños para saciar el instinto de caza que ha regresado al probar este alimento. Pero, ¿es este un mito o una realidad?
La alimentación influye de gran manera en nuestro estado de ánimo. ¿A quién no le ha cambiado el genio porque no está su comida lista o entre las opciones no hay algo que parezca apetitoso?
Lo mismo sucede con las mascotas, sin embargo, no significa que un alimento específico lo hace más dócil o agresivo. Así lo explica el veterinario Carlos Gutierrez, en su sitio web, especializado en nutrición canina.
Los alimentos no son buenos ni malos, lo importante es saber en qué proporciones deben ser administrados. La proteína animal cruda o semi cocida contiene triptófano, que produce serotonina para relajar a los mamíferos.
Incluso, existe la corriente mundial conocida como Barf o Acba que promueve que los animales de compañía se alimenten únicamente con huesos, carne y vegetales crudos, como lo hacían sus antepasados.
El inconveniente de dar esto a tú mascota es que puede tener bacterias y parásitos que causarán un daño a su sistema digestivo y, en el peor de los casos, puede ser mortal, explica Augusto Rueda.
Además, la dieta debe ser variada para que pueda obtener los nutrientes necesarios de acuerdo a su edad, condición física y tamaño. Hay mascotas que no toleran la carne y otras, que al no estar acostumbradas a comerla, pueden tener malestares porque es muy fuerte para su estómago.
Si tu perro pertenece a la tercera edad, no se recomienda dar alimentos duros que ocasionen un esfuerzo excesivo al momento de masticar la comida. En ese caso la carne cruda no sería la opción ideal.
Rueda advierte que los problemas de agresividad están relacionados con la falta de socialización o pueden ser una señal de que el perro está sufriendo alguna enfermedad, pero nada tiene que ver con su gusto por la comida cruda.
Además, hasta el momento no existe un estudio que demuestre que el perro que prefiere la proteína animal al balanceado, es un peligro para los demás.
Si tu decisión es alimentar a tu mascota solo con comida casera, debes consultar primero con el veterinario para que te asesore en cuanto a las proporciones y a las necesidades nutritivas específicas de tu can.