El 6 de julio entró en vigor la sanción de los aranceles estadounidenses a las importaciones chinas, el primer disparo de lo que Pekín llamó “la guerra comercial más grande en la historia económica”. Foto: AFP
Cabezas de cerdo, pistachos o whisky Jack Daniel’s, son algunos de los productos estadounidenses a los que China quiere imponer aranceles suplementarios, afectando aún más los intercambios comerciales entre las dos primeras economías mundiales.
Pekín replicó de inmediato tras la imposición el viernes 6 de julio del 2018 por Estados Unidos de aranceles punitivos, que afectan por valor de decenas de miles de millones de dólares a numerosos productos chinos.
Según una lista publicada por el ministerio chino de Comercio, antes del inicio de las hostilidades, varios productos estadounidenses se ven afectados, como la soja, los automóviles o el sorgo. A ellos se añaden otros bienes, que difícilmente pueden renunciar al mercado chino y sus 1.400 millones de consumidores.