Vizuete captó más la atención que Correa

Redacción Ambato

El director técnico de la selección ecuatoriana de fútbol, Víctor Vizuete, fue el más aplaudido ayer durante la cadena radial del presidente Rafael Correa.

 El Mandatario emitió su mensaje desde  la parroquia Guaytacama, del cantón Latacunga (Cotopaxi). Correa llegó a las 09:45, al aeropuerto de la capital de Cotopaxi, en un avión de la Fuerza Aérea Ecuatoriana.  

10 minutos más tarde, vía terrestre, llegó Guaytacama, tierra del seleccionador  ecuatoriano.

Vizuete se unió a las autoridades que se ubicaron en  la tarima levantada en la calle Sucre, en el centro de la parroquia. Un contingente de militares vigilaba el ingreso a este sector.
Unas 600 personas, que se concentraron en el parque central, saludaron al Mandatario. Luego cuando vieron ingresar a Vizuete se levantaron de sus asientos y le ovacionaron. Los vítores fueron interminables, por los triunfos de la Tri frente a Bolivia y Argentina. 

“ ¡Muy bien Vizuete!, ¡Adelante Vizuete!”, fueron los gritos que se escucharon, por más de una vez,  durante la intervención de Correa.  Con la música de la Selección como fondo,  el Primer Mandatario dijo que no está en Guaytacama por los merecidos triunfos deportivos. 

“Cuidado lo consideren de esa manera, esto ya estuvo planificado. Aprovecho la oportunidad para felicitar al técnico y a los jugadores de la Selección”. 

Vizuete, segundos antes de sentarse, levantó su mano derecha como agradecimiento a quienes lo ovacionaban. A las 11:00, el seleccionador ecuatoriano abandonó la tribuna de autoridades. Correa no se acercó a saludarlo, porque  una multitud rodeó al Técnico.

Fausto Venegas, amigo  de Vizuete, también quería saludarlo, pero fue imposible para él atravesar el cerco policial y militar que se montó durante la visita de Correa a Guaytacama. 

“El muchacho es un buen entrenador y una buena persona. Antes jugaba fútbol con mis hijos. Él vestía la camiseta de Deportivo Guaytacama y mis vástagos del Milán. Ojalá siga adelante con la Selección”, contó, con una amplia sonrisa.

Pese a la mañana fría y con garúa, Rosa Chiluisa, de 50 años, viajó de Saquisilí hasta Guaytacama. La mujer, con sombrero de paño, chalina roja y suéter morado, quería ver al Presidente. “Vengo a conocerle y a escuchar lo que dice. No sabemos si lo que habla se cumple o no. Pero ya le conocemos”.

Hasta las 12:50, el presidente Rafael Correa aún permanecía en la cadena radial. Un helicóptero de la Fuerza Aérea Ecuatoriana, que aterrizó, a las 10:00, en el estadio de esta parroquia lo debía trasladar nuevamente al aeropuerto de Latacunga.

Respuesta a la Casa Blanca

 El presidente Rafael Correa afirmó que le tienen sin cuidado los pedidos de Estados Unidos para que se garantice la libertad de expresión, al criticar en duros términos a un diario ecuatoriano que se hizo eco del llamado de la Casa Blanca.

“Señores, aquí hay un país soberano. ¿Saben cuánto me importa lo que diga el Secretario de Estado de Estados Unidos?... Aquí me va a importar lo que diga el pueblo ecuatoriano”. 
El  viernes, el  Departamento de Estado de EE.UU. pidió a los gobiernos garantías para la libertad de expresión.

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