Redacción Sierra Centro
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En el momento de colocar las ventanas de casas, centros comerciales o edificios, se debe tomar en cuenta que los vidrios cumplan normas de seguridad, que impidan el paso de los rayos UV, sean acústicos, de alta seguridad y que mantengan un ambiente fresco. Failam y Faitem son productos que ofertan todo esto.
Fairis puso en el mercado el vidrio de seguridad laminado con PVB (polivinibutiral).
Jorge Jaramillo, gerente general de la empresa, cuenta que su industria se especializa en la fabricación de vidrios de seguridad, especialmente para evitar accidentes con las personas, desde hace más de 30 años.
Por ello, pusieron en el mercado marcas como Faitem para el vidrio templado y Failam para vidrio el laminado.
Jaramillo explica que el Failam está compuesto por dos o más hojas de vidrio unidas entre sí por una o más interláminas de PVB (Polivinibutiral). En un proceso de presión y calor, estos se pegan y proporcionan resistencia mecánica al vidrio.
En caso de un sismo o rotura, los pedazos quedan adheridos a la lámina. Eso evita que en un impacto la persona se lastime.
En tanto, el vidrio templado se fabrica elevando la temperatura a 600 grados centígrados y enfriándolo bruscamente. Eso da la resistencia necesaria.
La seguridad no es solo en el caso de que se quiebre, sino también en la salud. La lámina interior de PVB (polivinibutiral) es importada desde Alemania, reduce la temperatura interior y bloquea entre el 97,6 y 99,5% la radiación ultravioleta. Además, permite que la temperatura ambiente se mantenga.
Jaramillo cuenta también que en el país no existe una norma para la utilización de vidrio de seguridad en las áreas de riesgo como centros comerciales, casas, edificios, aeropuertos…
“Un vidrio templado resiste cinco veces más que un crudo, este último está instalado en el 99% edificios y casas del país. Pocos son los propietarios y los especialistas que colocaron vidrios de seguridad en sus construcciones”.
En una construcción de 100 m² la diferencia de instalar vidrio crudo con el laminado es menor a USD 500. “El cliente escoge el color que desea. Se puede utilizar vidrio claro, gris, azul, bronce”.
El costo del vidrio laminado de 6 mm claro es de USD 20 el m². El vidrio reflectivo gris de 8 mm, en cambio, tiene un precio de USD 38 el m². Jaramillo asegura que en arquitectura se utiliza el vidrio laminado de 6, 8, 10 milímetros. Citó, por ejemplo, que en el aeropuerto de Quito se instaló vidrio de 17 mm de espesor.
En otros edificios, como en la ampliación del Quicentro Shopping, se utilizó la combinación de los vidrios Failam y Faitem. Asimismo, se instala en las Torres Marriot y en el edificio de la Universidad Católica de Guayaquil.
El edificio de Seguros Colonial y el Urbanplaza, en Quito, y en Ambato el nuevo edificio Ficoa Park, también lucen este tipo de productos que son procesados en la planta de Ambato.