La vida es ‘Preciosa’, aunque también está llena de golpes

Hoy se estrena en Ecuador ‘Preciosa’, uno de los filmes más sobrecogedores que hayan llegado desde Estados Unidos.

Verlo estruja el corazón. Deja mal parado al espectador. Lo abofetea. Le obliga a pensar en que la vida es algo más que chatear por iPhone, manejar un auto del año o escoger en un menú el plato de USD 20 .

El director, Lee Daniels, sorprende con esta propuesta cruda, directa, en la que narra un drama personal muy duro.

‘Preciosa’ cuenta la historia de Clareece ‘Precious’ Jones, una adolescente de 16 años casi analfabeta, pobre, que padece de obesidad mórbida y que está embarazada tras ser violada por su padre. De hecho, ya tiene una hija de dos años con síndrome de Down de una violación anterior del mismo individuo.

Para remate, su madre es un energúmeno lleno de rencor hacia Clareece. “¿Te crees mejor que yo porque tu padre te hizo más hijos que a mí?”, es el insulto más suave que lanza la mamá.

Pero hay espacio para la esperanza, pues Clareece, que sobrevive en Harlem, el barrio negro de Nueva York, tiene la oportunidad de aprender a leer y escribir. ‘Preciosa’ muestra los enternecedores esfuerzos de Clareece por combinar su vida con los estudios, a pesar de su embarazo, la pobreza y su feroz madre.

Lee Daniels refuerza la narración con una estética acorde a la dureza de la trama, en la que casi todo es feo o deprimente: el vestuario, la casa de Clareece y su mamá, la escuela y el vecindario. La fotografía también es apagada, lúgubre. Los diálogos son callejeros, con palabrotas. Daniels no se guardó nada para que el espectador se sumergiera en el triste mundo de Clareece. Lo único luminoso es la banda sonora, que mece el oído del espectador y le dice: “no te olvides que estás en Harlem”.

El director suma un poderoso acierto cuando salpica la historia con escenas de los sueños de Clareece. En medio de tanto dolor, de repente esta alma en pena se mira hermosa, o se proyecta como estrella del canto, con un novio guapo a su lado.

Esto otorga pequeñas dosis de humor, pero también son una manera muy inteligente de recordarnos que la protagonista es una adolescente, casi una niña.

El trabajo de Daniels no es impecable, pues hay vacilaciones y un toque de mal gusto cuando fuerza a que el guión mencione a Oprah Winfrey, la famosa conductora de televisión de EE.UU., quien puso el dinero para la película. También aparecen con papeles menores los cantantes Mariah Carey y Lenny Kravitz, un obvio gancho comercial.

Pero esto puede perdonarse por sus otros aciertos y por la gran actuación del reparto.

Gabourey Sidibe impregna de dulzura y realismo a Clareece y saca adelante su complejo papel. Aún más seductora es Mo’Nique, la actriz que encarna a la mamá de Clareece. Es tan convincente su interpretación, tan trabajados sus gestos, tan minuciosos sus arrebatos de cólera, que casi se palpa su maldad.

Por todo esto, ‘Preciosa’ recibió seis nominaciones al Oscar, aunque su mayor recompensa es haber humanizado las pantallas, repletas de vampiros y na’vis. No hace daño mirar al mundo real de vez en cuando.

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