Vïctimas de accidente en Papallacta serán enterrados en El Quinche y en El Chaco

Mañana, 14 de julio de 2014, serán enterrados los cuerpos de los cuatro miembros de la familia Rojas –Quichimba que perdieron la vida el 12 de julio en un accidente en la vía a Papallacta. Los familiares no llegaron a un acuerdo para velar a la familia en un solo lugar y debieron separarlos.

Carlos Rojas, de 52 años y Milton, de 11, fueron velados y reposarán en la parroquia de El Quinche, al norte del distrito de Quito. Mientras que María Quichimba, de 39 años y Karina Ríos hija de su primer compromiso, de 19 años, serán enterradas en el cementerio de El Chaco, provincia del Napo.

En la sala de la madre de Carlos se levantó una capilla ardiente y los dos féretros fueron rodeados de flores. La familia supone que los Rojas fueron de paseo a algún balneario de la zona ya que en el auto se encontró una maleta con toallas y ropa.

Las causas del accidente aun no están claras. Estalin Rojas, hijo de Carlos contó que la Policía les dijo que al parecer el auto perdió el control y fue a parar con las llantas hacia arriba en una especie de piscina pequeña que se había formado en media vía debido a unos trabajos de alcantarillado. Padre, madre y los dos hijos, murieron ahogados.

Los restos de las mujeres en cambio, fueron velados en la casa de los padres de María, ubicado en el barrio San José. La mujer nació y creció en ese sector. Apenas terminó la escuela, se dedicó a las labores del campo, cultivaba -junto a sus ocho hermanos- naranjilla.

Vivía hace tiempo en Ascázubi, junto a su actual esposo y sus dos hijos (los dos fallecidos); la tercera hija, de 17 años, vivía con el primer compromiso de María, en Checa.

Tras una trombosis, el Conadis le entregó a María un carnet de discapacidad y le ayudó a conseguir un trabajo. Laboraba, hace un año y medio, como mensajera en una empresa.

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