Paul Granda, ministro de Transporte y Obras Públicas (foto); y Gustavo Baroja, prefecto de Pichincha, firmaron el lunes la delegación de la vía que une a la Costa con la Sierra. Foto: Archivo / EL COMERCIO
Desde este lunes, 11 de diciembre de 2017, la administración de la vía Calacalí – La Independencia regresa al Gobierno Provincial de Pichincha.
Paul Granda, ministro de Transporte y Obras Públicas; y Gustavo Baroja, prefecto de Pichincha, firmaron hoy la delegación de esta carretera de 163 km, que une a la Costa con la Sierra del país.
Según Baroja, son varios los trabajos que necesita esta vía que se quedó “prácticamente abandonada” durante varios años. Por ejemplo, mencionó la estabilización de taludes y reparación total de la mesa de la vía en kilómetros como el 34 o el 41.
Para intervenir en estos puntos, el Prefecto adelantó un posible anuncio de declaración de emergencia de esta carretera, que será confirmado en los próximos días.
Para el mantenimiento de esta carretera, aseguró Baroja, si se implementarán dos o tres peajes en sitios que aún no se han definido. Uno de ellos podría ser en Calacalí, donde antiguamente funcionaba la estación del peaje administrada por el Gobierno Provincial.
Desde octubre del 2016 hasta noviembre del 2017, Obras Públicas invirtió más de USD 1 millón en el mantenimiento de esta vía, según la Cartera de Estado.