La Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT), es la institución que está a cargo de los fotorradares de velocidad. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
El índice de velocidad que se registra en los fotorradares, en ocasiones, no coincide con el del velocímetro de los vehículos. Durante un recorrido que realizó un equipo periodístico de este Diario, por la avenida Simón Bolívar, se identificó que estas cifras difieren.
En el sector de La Argelia, en el sur, el 9 de noviembre, durante 10 minutos, entre las 16:25 y 16:35, se identificó que al menos seis conductores superaron supuestamente los índices de velocidad establecidos. Uno incluso fue a 133 kilómetros por hora, cuando la normativa establece un máximo de 90 km/h para los vehículos livianos.
Cuando este equipo periodístico pasó por este sitio (La Argelia) a 82 km/h en el panel del fotorradar se marcó 75 km/h. En los dispositivos que están a la altura de la Loma de Puengasí, Guapuló y Monteolivo, las diferencias fueron menores. Entre el equipo instalado en la vía y el velocímetro los índices diferían entre dos y cinco kilómetros.
Patricia Salazar se moviliza a diario por esta vía periférica que atraviesa la ciudad de sur a norte por la parte oriental. Comentó que esta situación es común. “A veces los radares de velocidad miden más, en otras miden menos”.
La semana anterior esta conductora contó que circulaba en sentido sur-norte. En el tablero de su vehículo señalaba que iba a 81 km/h y el radar de la Loma de Puengasí marcó 91 km/h.
Para Guido Tipán, otro conductor, esta situación le resulta también cercana. “No se sabe qué velocidad es la correcta. La del radar o la del velocímetro”.
Cristian Quinteros, usuario de la Simón Bolívar, mencionó que las autoridades deberían revisar los dispositivos porque este tipo de diferencias en las mediciones podrían beneficiar a unas personas y perjudicar a otras.
La Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT), que está a cargo de los fotorradares de velocidad, informó que la calibración de estos dispositivos es trimestral. El mantenimiento se lo hace cada mes o cuando sea requerido.
La entidad explicó que el radar informativo (pantalla) es el que ocasionalmente sufre cierto tipo de alteraciones. Estas serían generadas, usualmente, por vandalismo. Esto hace que el aparato emita una señal de alerta al usuario, porque supuestamente va a exceso de velocidad.
Pero la cámara, otro componente del fotorradar, es el que mide estos índices de velocidad con precisión y sanciona al presunto infractor. “La cámara del fotorradar no sufre alteraciones”, citó la entidad municipal.
Para Alexis Ortiz, ingeniero mecánico, los equipos que miden la velocidad y los velocímetros de los vehículos tienen, generalmente, un margen de error. Por esto recomendó a los conductores no circular en las vías a los límites establecidos para evitar contratiempos.
Además, sugirió a los propietarios de vehículos no cambiar el tamaño de los neumáticos, porque esto podría incidir en la lectura de la velocidad. Los velocímetros calculan los kilómetros por hora en función de cuantas vueltas da una llanta en un lapso de tiempo. “Los neumáticos más grandes se demoran un poco más en girar”.
En promedio, según el último informe remitido por la AMT, en septiembre, los fotorradares de velocidad registraron, diariamente, a alrededor de 307 presuntos infractores. Estos son sancionados hasta con USD 354 de multa. En estos casos no hay reducción de puntos en la licencia de conducir ni prisión.