Redacción Guayaquil
La dos primeras turbinas que ayudarán a solucionar el problema de los apagones llegaron la mañana de ayer a Guayaquil.
Las primera, la LM6000 arribó en avión, desde Houston, Estados Unidos, y fue trasladada en tráiler hasta la Central Álvaro Tinajero, ubicada en el sector de El Salitral, en el noroeste de la ciudad. La segunda turbina se destinará a Manta.
Según un comunicado de la Eléctrica de Guayaquil, la turbina aportará 40 MW al Sistema Nacional Interconectado, con lo que se espera mejorar la oferta de energía eléctrica. La unidad funciona a diésel y requiere alrededor de 70 000 galones diarios.
Josué Gavilánez, gerente de la Central Álvaro Tinajero, señaló que su instalación tomará seis días y que el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) será el encargado de distribuir la energía de esta planta tanto a Guayaquil como al resto del país.
La segunda unidad para el Puerto Principal, un modelo TM 2500, aportará 20 MW. Este equipo incluye un generador y una turbina libre que se instalarán en la Central Aníbal Santos, en Pascuales, sitio donde ya se alistan los terrenos. Se espera que esté en Guayaquil el próximo 20 y que funcione a fin de mes.
Mientras el presidente de la República, Rafael Correa, en su enlace del pasado sábado, dijo: “Guayaquil va a ser la primera ciudad que desde el próximo jueves ya no contará con racionamientos”, la Eléctrica Guayaquil anunció ayer su programa de racionamientos hasta el próximo viernes 11.
“Dios mediante, después de una semana más, antes de Navidad, como ofrecimos, ya ningún sector de Ecuador tendrá racionamientos, porque habremos logrado superar la emergencia”, señaló el presidente Correa.
El Mandatario criticó que “por centralismo, torpeza o mala fe”, a Guayaquil se le cortó la energía eléctrica más tiempo que al resto del país. Por ello, el Puerto Principal, desde el jueves, será la primera ciudad que ya no tendrá racionamientos.
Según el cronograma de la Eléctrica de Guayaquil, entre el martes 8 y el viernes 11, la Eléctrica continuará excluyendo de esta medida al sector industrial, aunque mantiene los cortes nocturnos en sectores populares, que han ido variando cada semana.
Así, en el sur, en zonas como Las Acacias, La Saiba, Valdivia, Coviem, Los Esteros, Centenario Sur…; y en el norte, en La Alborada, Sauces, Guayacanes, Samanes, Polaris, Álamos, Rosales, Vergeles, Mucho Lote… los cortes serán de 18:00 a 19:30. Esto preocupa a los habitantes por la inseguridad que afronta la ciudad.
El pasado sábado, durante la entrega de 1 500 líneas telefónicas en el Suburbio de Guayaquil, el ministro de Sectores Estratégicos, Galo Borja, explicó que el mismo día que se declaró la emergencia energética, el Gobierno inició la importación de siete turbinas General Electric.
“El 15 de diciembre estarán funcionando cuatro y para enero, tres. De esas siete, cuatro serán para Guayaquil”.
El ministro Borja insistió en que durante año y medio se ha dado mantenimiento al parque termoeléctrico del país. “El 100% del parque termoeléctrico está en óptimas condiciones y estamos comprando nuevos equipos para garantizar el futuro de la soberanía eléctrica del país”.
El nivel del embalse no mejora
La cota del embalse de Amaluza, que aprovisiona a la Central Hidroeléctrica Paute, sigue por debajo de los 1 980 metros sobre el nivel del mar. Ayer, a las 08:00, el embalse se ubicó en 1 977 metros, según cifras de la Corporación Eléctrica del Ecuador.
El caudal promedio del río Paute, a esa hora, fue de 37,48 metros cúbicos por segundo. La cifra es baja comparada con la del 28 de noviembre, cuando el caudal alcanzó los 119,6 metros cúbicos por segundo. Ese fue el ingreso de agua más importante ocurrido desde noviembre, cuando empezó la crisis.
Según información técnica del Centro Nacional de Control de Energía, hasta las 12:00 de ayer, la Central Paute generó 1 062,1 megavatios (MW) trabajando hasta las 10:00 con un generador y desde esa hora con dos. La proyección de generación para todo el día era de 3 750,1MW.
El sábado se reportaron copiosas lluvias en algunos sectores de Cuenca, no obstante esas precipitaciones no incidieron mucho en el nivel del embalse.
Hasta el mediodía de ayer, la demanda de energía del país fue de 17 677,4 megavatios, de ellos 11 859,3 megavatios (el 67%), provino de las centrales térmicas y apenas el 6% de la central Paute, cuya capacidad puede abastecer, en condiciones normales, el 30% de la demanda nacional. Redacción Cuenca
Testimonios
Roberto de la Cruz/ Quito
‘Nuestro generador se dañó por los apagones’
Soy administrador del complejo del centro comercial y departamentos Naciones Unidas (CCNU). Apenas el Gobierno anunció la emergencia eléctrica comenzamos a utilizar nuestra planta generadora. Sin embargo, a los pocos días el equipo se dañó por una variación de voltaje, luego de que regresara el fluido tras un corte. Este tenía una capacidad de 800 kW y abastecía a 156 locales del centro comercial y 76 departamentos de la torre D. Pedimos a la Empresa Eléctrica Quito (EEQ) que reponga el artefacto, pero nos dijeron que no responden por pérdidas que se producen si los cortes fueron anunciados. Lo que hicieron fue prestarnos un generador de 400 kW, por lo que estamos trabajando con el 50% de energía.
Aníbal Paredes/Guayaquil
‘Sin energía eléctrica tampoco hay agua’
Para las personas que nos abastecemos de agua que almacenamos en tanques, los cortes de luz implican también la falta de líquido vital. Como el agua llega a las tuberías gracias a la succión de una bomba eléctrica, cada vez que hay un apagón no podemos bañarnos, ni usar los inodoros. Al inicio de los racionamientos la situación fue bastante complicada, porque los cortes se iniciaban a las 06:00 y debía tener recogida el agua en baldes para preparar los alimentos, poder tomar una ducha e irme a trabajar. A esto hay que sumarle que está comenzando el invierno en la Costa y el calor es insoportable. Cuando no tenemos energía eléctrica no contamos ni con aire acondicionado ni ventiladores, lo que hace bastante complicada la vida diaria.