Los manifestantes ocuparon parte de la Plaza Grande para realizar una protesta. Foto: Mayra Pacheco / EL COMERCIO
Un grupo de transportistas que prestan el servicio por la avenida Simón Bolívar realiza una protesta, este 18 de febrero, frente al Municipio de Quito. Los manifestantes que ocupan una parte de la Plaza Grande solicitan una audiencia con el alcalde Mauricio Rodas para tratar la situación que atraviesa este gremio en esta vía.
Carlos Mosquera, representante del Corredor Simón Bolívar, mencionó que en esta vía periférica ha crecido de manera indiscriminada la oferta de buses. Él aseguró que la cifra de unidades pasó de 300, en el 2014, a 600 en el 2016. Por esto, solicitan que se realicen controles y se implemente un proceso de regularización. “Hay mucha competencia”, mencionó Luis Cuji, conductor.
Esta avenida es utilizada por cuatro rutas de transporte regularizado: Quitumbe-Aeropuerto, Chillogallo-Marín, Focalpi- Universidad Central, San Martín Villa Flora. Son 124 buses. Aparte hay furgonetas que prestan el servicio desde Guajaló hacia Carapungo, Cumbayá y la avenida Granados, enfatizó Mosquera.
El dirigente aseguró que seguirán con esta medida hasta obtener una respuesta de las autoridades. Por el momento, hasta las 09:20, el tránsito por la calle Venezuela es normal. En el lugar hay presencia de agentes civiles de tránsito y policías nacionales.