Los usuarios abarrotaron las nuevas unidades articuladas

Ecovía

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Desde este 5 de marzo comenzaron a funcionar las nuevas unidades que adquirió el Municipio de Quito, para mejorar el traslado de personas tanto en el Trolebús Quito como en la Ecovía. Foto: Betty Beltrán/EL COMERCIO

17:00. Es la hora pico en la estación La Y del sistema Trole. El andén se llena de usuarios; cada dos minutos llegan los articulados que van hasta la estación El Recreo. Pero no son las nuevas unidades que hoy 5 de marzo del 2015 inauguró el alcalde Rodas.

La expectativa de algunos usuarios, como Luis Morocho, es subirse en una nueva unidad. Pasan uno, dos, tres, cuatro articulados, pero de los antiguos.... nada que llega una de las nuevas.

Miriam Puente, vecina de La Magdalena, también desea subirse en uno de los flamantes articulados para ver que tal es ese transporte. "Dicen que son más ligeros, quiero comprobar eso", dice Puente, Ya han pasado 13 unidades y ninguna de las nuevas. Morocho y Puente ya no pudieron esperar más y se marcharon. "Otra vez será", dijo Morocho.

Un operador de la estación, quien obvió su nombre, indica que no entraron los nuevos articulados a esa hora porque tres llegaron con algún inconveniente. Por ejemplo, un bus emanaba un olor a caucho quemado, otro no encendía...

Los usuarios hicieron largas filas para utilizar las nuevas unidades del Trolebús Quito. Foto: Betty Beltrán

Pero al turno 14, al fin, llegó una nueva unidad. Los usuarios se llenaron hasta el tope. Los empujones se multiplicaron, la capacidad de la unidad : es total. El conductor ofreció un saludo. Eran las 17:49 y el vehículo arrancó.

Algunos usuarios comentaban: "Me parecen más pequeños estos nuevos troles", dice uno. Otro responde: "Por más unidad nueva, sería bueno poner fin a los empujones de la gente".

En la parada Plaza Grande la subida de pasajeros fue la más grande. Tantos usuarios se subieron que las puertas no cerraban. La gente gritaba: "¡ya no hay dónde,ya no hay dónde!".

En la parada de Santo Domingo hubo líos: "Mejor no abra la puerta ya no hay dónde", gritaban los usuarios.

En la parada La Recoleta se intentó ingresar a más pasajeros.... No se permitió: "No hay espacio", exclamó el conductor Galo Garcés, de la unidad 3.
Felipe Urresta, vecino de El Recreo, dijo que le daba la impresión de que la nueva unidad va muy lento. Pero hay que ver con los días.

Según Julio Vergara, las paradas más duras (donde se suma más gente) son La Y, Cuero y Caicedo, El Ejido, Colón, Santa Clara, Plaza Grande, Santo Domingo, Villa Flora. En Chimbacalle se subió una cantidad grande de estudiantes y la puerta tercera no se cerraba. Eran jóvenes del Colegio Quito. 49 minutos después arribó a la estación El Recreo. El conductor iba inquieto, pues a lo largo del camino no se cerraban las puertas. Mañana será otro día, dijo , y volvió a colocarse en la final para dar la vuelta con los usuarios.

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