En Tena no hay agua potable ni energía
Nancy Rodríguez E. Enviada a TenaEfraín Rueda es dueño del restaurante La Tulpa, en Tena. Ayer, él colocó tinas en su patio para recoger la lluvia. Desde el martes pasado, en esta ciudad y en sus alrededores no hay agua potable. La crecida de los ríos, por la fuerte lluvia de la noche del lunes y madrugada del martes, arrasó con la red principal del servicio. La planta de tratamiento también fue afectada. En la actualidad, el personal del Municipio trabaja para restituir el suministro.La reanudación del servicio puede durar de dos a 15 días, en las zonas periféricas. Hay que cambiar la tubería en Bajo Ontoga, uno de los sectores más afectados por la crecida del río Tena. Ayer, los habitantes recogían agua de las vertientes.Los dueños de los restaurantes de Tena compraron agua de tanqueros para no cerrar sus negocios. Esta cuidad no es la única afectada por la falta del líquido, también lo están Misahuallí y Archidona. En esta última, 980 metros de tubería colapsaron. Las autoridades municipales prevén superar el problema desde mañana. “La crecida nos dejó sin agua, sin luz y casi sin caminos”, dice Pablo Andy, del barrio Tereré, en el centro de Tena. En este sitio, la corriente arrastró los postes de energía eléctrica. Algo similar ocurrió en Ongota, Bajo Ongota, La Soga y Bellavista. A eso se suma la escasez de gasolina en Tena y Archidona. “Por los derrumbes, no pueden pasar los vehículos”, señala Alberto Sierra, de Terpel, en Tena.En los surtidores de combustible se formaron largas filas de vehículos. La frase que repetían los empleados de las gasolineras era la misma. “No hay gasolina. Lo poco que llegó la noche del martes es para las instituciones, para que atiendan la emergencia”, dijo Sierra, en la mañana de ayer. En Archidona, a 20 minutos de Tena, tampoco hay gasolina. El gobernador de Napo, Milton Hidalgo, esperaba que el desabastecimiento se solucionara anoche. Él coordinó con Hidalgo &Hidalgo, empresa encargada del mantenimiento de la vía Quito-Baeza–Tena. Existe el compromiso de habilitar hasta hoy el acceso afectado por los deslaves. Desde el martes, siete máquinas trabajan en esa tarea. Hasta la mañana de ayer, se registraron tres derrumbes grandes y 13 pequeños. Se dispuso que el paso se habilitara de 06:00 a 07:00. También de 13:00 a 14:00 y desde las 17:00 hasta las 19:00.Muchas personas caminaron. Uno de ellos fue José Lusintuña. Él salió de Quito, a las 05:00 y debía llegar a Archidona para firmar un contrato. Se bajó en el kilómetro 24, donde el paso está cerrado. “Me saqué los zapatos y caminé hasta encontrar un carro”.Ayer, la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos autorizó a las autoridades locales que se inicien los trabajos de reconstrucción de las zonas afectadas y que se canalice la ayuda.