El aguaje comenzó el 2 de enero y finalizará el 5 del mismo mes. Foto: Cortesia Toledito TV
Salinas ganó más playa. En los puertos pesqueros de Anconcito, Santa Rosa y Posorja las embarcaciones quedaron varadas en la arena. Y el fondo marino se visibilizó en Bahía de Caráquez, donde incluso fue posible llegar a pie al faro.
Al mediodía de este jueves, 4 de enero del 2018, las cámaras del ECU 911 captaron el efecto de las mareas de sicigia o aguajes, que causaron un retroceso del mar, un poco más amplio a lo usual. El Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar) descartó que se tratara de un tsunami, mientras que los pobladores de las zonas costeras aseguraron que no es tan inusual.
“Los nativos de Santa Rosa sabemos que hay un tiempo, entre diciembre y enero, que se seca un poco más. Ahora ha retrocedido unos 300 metros, desde el malecón; en un aguaje normal desciende unos 100 metros. Pero hace unos 25 años recuerdo que se secaron unos 800 metros”, dice Ramón González, presidente de la cooperativa de producción pesquera artesanal Santa Rosa de Salinas.
El aguaje comenzó el 2 de enero y finalizará el 5 del mismo mes. Edwin Pinto, director de Oceanografía Naval del Inocar, aclara que se producen de manera periódica (cada 14 días, aproximadamente), por la atracción gravitacional del sol y la luna sobre el agua.
“Comenzamos el año con luna llena, que es cuando se producen los aguajes. Además coincidió con el perihelio, cuando el sol está más cercano a la tierra; y con el perigeo, cuando la luna está más cerca. Estas tres cosas hicieron que el nivel del mar suba y baje más allá de lo normal”. La baja temperatura del océano y los vientos provenientes del oeste fueron factores adicionales.
Los mayores efectos se reportaron ayer y hoy. Los próximos aguajes serán en 14 días y a inicios de febrero. El Inocar informó que a lo largo del 2018 ocurrirán 10 aguajes máximos, caracterizados por la coincidencia de la luna llena o nueva con el perigeo lunar.
El puerto de Santa Rosa, en Salinas, registra unas 1 500 embarcaciones. González asegura que por efecto de la delincuencia, más no de las mareas, unas 400 lanchas están activas. Y solo 200 salen de faena. Para continuar con su trabajo, algunos pescadores previeron anclar sus fibras en zonas más lejanas y así facilitar su salida.
La bajamar de esta semana ha causado ciertas complicaciones en el arribo de la pesca a Santa Rosa. Cada lancha captura entre una y dos toneladas al día y algunas pescadores navegaron hasta un canal natural para la descarga. Otros usaron hielo para conservar el producto en alta mar hasta que el agua les permita acercase más.
Los aguajes duran entre tres y cuatro días. Los ciclos de pleamar (nivel más alto del mar) y bajamar (nivel más bajo) son de seis horas. En cada ciclo hay un periodo de esto, cuando los niveles permanecen estables.