París. AFP y DPA
El sueco Robin Soderling, número 25 mundial, se confirmó ayer como gran sorpresa de Roland Garros al derrotar al chileno Fernando González, cabeza de serie nro.12, en cinco sets por 6-3, 7-5, 5-7, 4-6 y 6-4. Así, hizo historia al meterse en su primera final de un torneo de Grand Slam.
Soderling, el hombre que asestó su primera derrota en Roland Garros al español Rafael Nadal, campeón los cuatro últimos años, se medirá mañana en la final con el suizo Roger Federer.
En una semifinal que empezó en una cancha Philippe Chatrier casi vacía, un sólido Soderling hizo valer su imparable servicio, que llegó al alcanzar los 230 km/hora. Su eficaz derecha y su gran visión del juego confirmaron que partía como favorito para alcanzar su segunda final de Grand Slam durante su carrera.
Soderling, inesperado ya en semifinales, escribe así otra página en la historia del tenis de su país. Se convirtió en el primer sueco que alcanza la final de Roland Garros, desde Magnus Norman -ahora su entrenador-, en 2000, y en el séptimo que disputa el último partido en el torneo de Grand Slam en arcilla.
“Fue un partido increíble. Jugué muy bien en los dos primeros sets y luego Fernando empezó a mejorar, con un gran servicio”, explicaba el sueco. El triunfo fue meritorio porque tras ganar los dos primeros sets, perder el tercero y el cuarto y estar 4-1 abajo en el último, dio la vuelta al marcador.
“En ese momento me dije que tenía que luchar hasta el final para intentar la remontada y mantener la esperanza”, añadió el sueco, que nunca hasta ahora había pasado de tercera ronda en un Grand Slam y no cuenta ningún título en tierra batida entre los tres que figuran en su palmarés.
Mientras tanto, González aseguró que se retira del certamen parisino “sin rencor”. “Eso es lo que hace al tenis interesante”, subrayó ante la prensa.
“Sentí el partido en mis manos”, admitió González tras perder por 6-4 en el quinto set.
“Por eso el tenis es tan atractivo, porque nunca se sabe qué va a pasar hasta el final. Temía que podía pasar lo que pasó”, decía después el chileno, que habría alcanzado su primera final en el torneo de Grand Slam sobre tierra batida y la segunda de un ‘grande’, tras perder en Australia en 2007.
“Si me preguntan hace unos años qué final de Grand Slam estaría jugando en 2009 no habría dicho Roland Garros. Pero estoy jugando cada vez mejor en tierra”, replicó emocionado Soderling.
Pero desde que ganó a Nadal en octavos de final, superando “el mayor reto que se puede tener en tenis hoy, seguía en el torneo y quería más. He perdido varias veces (nueve) contra Federer y es muy difícil ganarle pero tengo la misma opinión de Del Potro. Uno no llega a semifinales de un Grand Slam por casualidad”.
Federer sufrió pero avanzó
El suizo Roger Federer (nro. 2) derrotó por 3-6, 7-6 (7/2), 2-6, 6-1 y 6-4 al argentino Juan Martín del Potro (nro.5), ayer, en el ‘court’ Philippe Chatrier y jugará su cuarta final consecutiva.
Con este resultado, el número dos del tenis mundial tiene la posibilidad de añadir a su palmarés el único título del Grand Slam que le falta, precisamente el único disputado sobre arcilla.
“Si gano la final será todavía más fuerte. Estoy muy satisfecho por haberme recuperado y con un poco de suerte ganar. Juan Martín es joven. Es triste y duro para él haber perdido”, expresó el suizo al salir de la cancha.
Mientras que sobre su rival de mañana, dijo: “Soderling hizo un gran partido ante González. ¡Fue impresionante! Merece estar en la final porque también derrotó a ‘Rafa’ (Nadal)”.
La clave del triunfo de Federer sobre Del Potro estuvo en el tercer set, cuando elevó su nivel. Entonces se hizo fuerte desde el fondo con golpes ganadores y cruzados. El gaucho, en cambio, cometió muchos errores. AFP