Redacción Cuenca
La nacionalidad Shuar inicia hoy su asamblea anual. A las 16:00, en el cantón Sucúa, Morona Santiago, los dirigentes se congregarán y participarán de una ceremonia.
En esta ocasión, la agenda girará en torno al tratamiento de la situación de su emisora La voz de Arutam. Según el Gobierno, este medio convocó a hechos violentos que causaron la muerte del dirigente Bosco Wizuma.
400 miembros
de la nacionalidad Shuar
participan desde hoy de su asamblea anual en Sucúa.
Por eso, el 17 de diciembre, el Consejo Nacional de Telecomunicaciones inició el proceso para terminar el contrato de concesión.
Para la asambleísta shuar Diana Atamaint, la asamblea es un espacio para debatir sobre esta situación. “Habrá un debate intenso y razonado para decidir si se inicia un paro en caso de que La Voz de Arutam sea cerrada”.
Según Atamaint, las propuestas serán aprobadas en consenso. Ella asegura que la resolución que emitió el lunes la comisión especial que investiga la muerte de Wizuma no hará que la comunidad shuar, “baje la guardia mientras sigue el proceso”.
Esta comisión estableció que no hay indicios para determinar que La Voz de Arutam haya promovido la violencia en el último paro en Morona Santiago.
El presidente de la Federación Shuar, José Acachu, dice que mañana se instalará una mesa de análisis de la situación política del país. Se discutirá la relación con el Gobierno.
“Debatiremos sobre los diálogos y determinaremos si funcionaron”.
Él cuenta que casi a diario informan a sus bases sobre la clausura de la emisora y el estado de las apelaciones. Por ello, “las bases llegan con propuestas para desarrollar una estrategia sobre este tema”.
En la asamblea, explica Acachu, el abogado encargado de seguir el caso de La Voz de Arutam, Julio César Sarango, dará un informe del proceso.
Después de los tres días de reunión, el viernes se emitirán las resoluciones. Estas tendrán carácter de mandato para la nacionalidad Shuar, señala el líder de la etnia.
Mientras tanto, en las antenas repetidoras de la señal de la emisora La Voz de Arutam están dos miembros de la etnia shuar.
Según Acachu, ellos custodian estas instalaciones con el propósito de que no exista ningún altercado. “Ellos nos informan a diario sobre su trabajo”.