Redacción Guayaquil
Acalorada y un poco confundida, Francisca Pinela esperaba ser atendida por la inspectora de Trabajo para Servicios Domésticos.
Con una copia de la boleta de citación en la mano, explica cómo término su relación laboral en una casa. “Mi patrona me trató mal, me acusó de que le había robado cosas y me botó.
Fue adonde una bruja que le dijo que yo era ladrona, pero nunca cogí nada de esa casa”, dijo.
Pinela trabajó durante un año en casa de una familia y recibía como pago USD40 a la semana. No estaba afiliada ni ganaba otros beneficios. “Fueron hasta mi casa para revisar si yo tenía sus cosas. Eso me dolió mucho y por eso decidí denunciarla”.
Como Pinela, a diario van a esta dependencia, en promedio, unas 10 personas. Lo hacen para presentar sus denuncias por despido sin liquidación, no estar afiliadas al IESS, ganar menos del salario básico unificado (SBU) o para informarse de los beneficios de Ley.
Lastenia Cevallos llegó el pasado viernes hasta la Subsecretaría de Trabajo junto a su hija embarazada. Ambas iban a presentar una denuncia en contra de su anterior patrona.
Cevallos trabajo hasta el 4 de enero en una casa de la cual salió por divergencias con su empleadora. “Un día falté porque mi mamá estaba enferma y no les avisé, desde ahí se portaron indiferentes. Después de fin de año ni fui porque me enfermé y cuando llamé ya habían contratado a alguien”. Con la demanda, ella esperaba recibir la indemnización por los dos años y medio que trabajó.
Los empleadores también acuden para informarse sobre los requisitos para contratar a empleadas domésticas. Alba Zambrano, madre de dos hijos y administradora de Casa Comercial Marthita, llegó a la Subsecretaría para que le aclaren sus dudas. Una de ellas es saber cuánto debe pagar por la afiliación del Seguro, cómo se aplican las vacaciones y cuáles son las responsabilidades de las empleadas en caso de no cumplir con sus tareas domésticas.
Alba sostuvo que paga USD 180 mensual y que va a pensar subirle el sueldo a USD 240 o despedirla. “Mi empleada me dice que le pague los USD 180 pero que no la bote. Igual debo asesorarme para evitar problemas legales en el futuro”.
Hace un mes, las empleadas domésticas no registraban visitas masivas a la entidad. Pero cuando el presidente Rafael Correa dispuso que el SBU para las empleadas domésticas sea de USD 240 más beneficios de Ley y que exijan sus derechos para ser afiliadas al Seguro Social, empezaron las visitas y las denuncias.
Ahora, la relación laboral de las empleadas domésticas tiene nuevas reglas, aunque los mismos inspectores de Trabajo tienen dudas. Se limitan a decir que se debe cumplir el Código Laboral y pagar todos los beneficios de Ley como los decimotercero y decimocuarto, cancelación de horas extras, modelos de contratos y liquidaciones. Está pendiente lo que diga el Reglamento, cuando se apruebe.
Hace dos años, el salario era menos de USD 100 pero ahora será de USD 240; sumando los beneficios y restando el aporte al IESS (9,35% del sueldo) recibirá en promedio mensual USD 277. Cuando haya despido tendrá que liquidarse con todo lo que exige la Ley.
El ministro de Relaciones Laborales, Richard Espinosa, dijo que ahora cada subsecretaría tiene una inspectoría de Servicios Domésticos para formalizar las denuncias y hacer respetar los derechos de cada empleada.
Los requisitos que deben cumplir
Los empleadores deben elaborar un contrato de trabajo notarizado con sus respectivas responsabilidades y requisitos para que las empleadas realicen las tareas. Eso incluye sueldo, horas de trabajo, funciones y beneficios de Ley. Luego se debe inscribirlo en la Inspectoría de Trabajo.
Los patrones deben afiliar obligadamente a las empleadas domésticas al Seguro Social. Para eso, requieren el contrato notarizado y avalado por la Inspectoría de Trabajo. Con esos documentos debe acudir al IESS para que le otorguen el número patronal y el carné del IESS. Además, deben aportar el 11,5% al Seguro por cada empleada que tenga a su cargo.
La obligación de los empleadores es pagar los beneficios de Ley como decimotercero y decimocuarto sueldos cada año. Solo trabajar de lunes a viernes y si se pasa de su jornada laboral pagar las horas extras. Conceder 15 días de vacaciones. Y si tiene más de cinco años dar un día adicional por año a sus vacaciones. El pago de utilidades no se aplica, ya que no es una empresa.
Las empleadas que no reciban el pago de los USD 240 como sueldo básico deben acudir a la Inspectoría de Trabajo para presentar una denuncia y solicitar que un inspector de Trabajo realice la inspección y verifique el incumplimiento de la Ley. Ese trámite no tiene costo y se realiza en la Subsecretaría de Trabajo.
Si la empleada doméstica no es afiliada al Seguro Social puede acudir a una de sus oficinas y presentar una queja para que se realice una inspección. Así se puede sancionar al empleador y obligarlo a que afilie a sus trabajadores. Si el patrono no paga en 30 días, se emite un título de crédito que será cobrado a través de un proceso coactivo.
La jornada laboral de las empleadas ahora será de ocho horas días, sin incluir fines de semana. En caso de trabajar más de ese tiempo y en días de descanso se deberá cancelar el pago de horas extras, ya sean ordinarias o extraordinarias. Así también si el trabajador no acude a su lugar de trabajo se aplicará el visto bueno sin reclamo a liquidaciones ni beneficios.