Redacción Tulcán
Los agricultores de la provincia de Carchi están desesperados por la sequía y por las heladas que están destruyendo los cultivos.
El campesino Luis Borja tenía lista la semilla de fréjol para la siembra. “La tierra está seca y así el grano no germina”, dijo.
En la parroquia de El Carmelo, en el cantón Tulcán, las heladas del viernes pasado afectaron los sembríos de papa, maíz y arveja. “Las plantas se quemaron y no hay quién ayude a los agricultores del sector”, dijo René Noguera, presidente de la Junta Parroquial.
Los campesinos, con recursos propios, tratan de salvar los cultivos. Eduardo Benavides, agricultor de Tufiño, invirtió USD 100 y pagó a cinco trabajadores para que apliquen revitalizantes en el cultivo de papa.
Gabriel Tarapués, campesino de la parroquia La Libertad, en el cantón Espejo, destinó una parte de los USD 800 que le prestaron en la Cooperativa de Ahorros, para la compra de insumos.
Mientras que al Banco Nacional de Fomento, van a diario agricultores en busca de un préstamo. “Queremos comprar tres vacas, porque sembrar ya no deja nada de plata”, dijo Bolívar López. Él vive en Chapuel.
El gerente de la sucursal de la entidad en Tulcán, Benigno Romero, informó que se entregan hasta USD 7 000 a quienes tienen garante . “El préstamo puede ser individual o grupal”.
El trámite para adquirir el dinero demora unas dos semanas. En ese período la entidad verifica los datos del solicitante.
Con respeto a las personas que han solicitado prórrogas para el pago de préstamos hay dos trámites. “Se hará un análisis y se puede llegar a un acuerdo de pagos”, manifestó el funcionario.
Los agricultores han justificado que no pueden pagar, porque no tienen ganancias. Sus cultivos se han dañado por la sequía.
Mientras que en los locales donde se expenden productos agrícolas se incrementaron los pedidos de revitalizantes de control de pudrición de la raíz, protección, eliminación de mosquitos…
Ramiro Mora, trabajador de un local del centro de Tulcán, manifestó que a inicios de año se comercializaba los productos para la siembra. “Debido al verano prolongado, ahora compran productos para eliminar las plagas”.
Él cuenta que los precios no han variado. El revitalizante se expende entre USD 4,50 y 7, dependiendo de la marca.
Para José Rodríguez, dueño de un almacén agropecuario, la actual condición climática es preocupante. “Los agricultores no compran abonos ni semillas, apenas se vende unos pocos litros de revitalizante”, explicó.
Segundo Villota, agricultor de la parroquia de San Isidro, dejará que el cultivo de arveja se pierda, porque no tiene suficiente dinero para intentar recuperarla.
Los agricultores se organizaron para pedir ayuda al Gobierno.
Las pérdidas
Unas 400 hectáreas están afectadas por la sequía y las heladas, según la Dirección del Ministerio de Agricultura de Carchi.
En los mercados, los precios de las hortalizas y verduras se elevaron. Por ejemplo, la arveja pasó de USD 1 la libra a 1,30.