La secuencia es breve. En 100 segundos, los dos sospechosos disparan a quemarropa a José y Fernando Changoluisa, arrebatan la mochila con USD 25 000 y huyen en motocicletas. Las cámaras de seguridad del bus grabaron las escenas.
En los últimos días, el video del asalto fue filtrado y apareció en las redes sociales. Los comentarios se multiplicaron: “Mucha tristeza e indignación”; “Sobre la brutalidad, la indiferencia de la gente”; “Impresionante el video… debemos ser más solidarios y dar una mano cuando seamos testigos de estos hechos, observo al señor que sale y nadie trata de ayudarle”, son algunos de los mensajes publicados en YouTube, que hasta las 18:10 de ayer, 6 de marzo, registraba más de 82 300 visitas.
Ayer, la familia Changoluisa celebró una misa en Amaguaña, donde ocurrió el asalto, para recordar un mes del doble asesinato.
“Somos muy religiosos. Queremos que descansen en paz y se salven sus almitas, por eso decidimos hacer en ese lugar”, relató a este Diario, Óscar Changoluisa, quien perdió a su padre y a su hermano, el pasado 5 de febrero.
Para la familia, la rutina cambió tras el crimen. Ahora viajan dos veces por semana desde Machachi para conocer los avances de las investigaciones. El sábado llegaron a Quito tras el anuncio de la Policía sobre la captura de seis sospechosos del ataque.
Ese día, autoridades del Gobierno incluso señalaron que entre los detenidos está Meder S., quien se fugó el 15 de diciembre pasado del expenal García Moreno, de Quito.
Él cumplía una sentencia por el asesinato del boxeador Jaime ‘La Bestia’ Quiñónez, registrado la noche del 4 de julio del 2012, en el norte de la capital.
En las imágenes registradas en el video se observan cómo los dos sospechosos, con gorras oscuras, golpean con las armas de fuego a Fernando Changoluisa. El joven llevaba una mochila con el dinero y se opuso al asalto, En la unidad viajaban cerca de 20 personas, entre niños, mujeres y hombres. Todos observan aterrorizados el crimen.
Fuentes de la Policía Judicial (PJ) dan cuenta que el video fue clave dentro de las investigaciones. Además hubo testimonios de personas que presenciaron los hechos.
Con esos indicios, el sábado, agentes de la recién creada Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro (Dinased) desplegaron un operativo y desarticularon a la presunta red delictiva que habría participado en el asalto.
A los seis detenidos se los indaga por pertenecer -según la Policía- a una banda dedicada al robo a personas bajo la modalidad de sacapintas.
En un comunicado, el Ministerio del Interior advirtió que en el operativo se decomisaron dos motocicletas que “responden a las características de las usadas” el día del crimen.
El sábado anterior, luego de la audiencia, los sospechosos fueron trasladados a Guayaquil a un Centro de Rehabilitación Social de máxima seguridad.
Ayer, la familia Changoluisa comentó que mantienen fuertes deudas. El dinero que perdieron fue de la venta de una camioneta con el que iban a cancelar las cuotas en un banco, por una hipoteca que está vigente.
“No nos queda más que seguir trabajando y pagar las deudas”, señalaron los allegados.
Botones y cámaras en buses
Desde diciembre del 2012, la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) impulsa el denominado ‘Transporte Seguro‘, un proyecto de seguridad para el transporte público y comercial que opera a escala nacional.
Para la ANT, con este proyecto se pretende disminuir la inseguridad en un 80%.
Ayer, este Diario consultó a cuatro choferes profesionales que conducen buses urbanos en Quito. Ellos coincidieron en que hasta ahora no han utilizado los equipos de seguridad instalados dentro de las unidades porque no se han reportado eventos delictivos.
Leonardo Vasco trabaja en un autobús de la Cooperativa Catar con Registro Municipal número 0807. A su juicio, la instalación de los dispositivos electrónicos sirve como un elemento disuasivo para la gente que se dedica a atracar en las unidades. “Son útiles, pero hasta ahora no se han presentado inconvenientes”.
El chofer también se queja de que no se puede enfrentar a la delincuencia, pues lo han agredido cuando no ha permitido el ingreso de desconocidos al vehículo que conduce. “Nos esperan al regreso del recorrido y nos lanzan piedras”.
José Mejía maneja un bus de la Cooperativa Alborada con Registro Municipal 1420. Él tampoco ha utilizado las cámaras y el botón de seguridad. Para él, lo más importante es preservar la seguridad de los pasajeros porque “al chofer y al controlador no les hacen daño cuando desconocidos roban”. “A nosotros solo nos apuntan con armas. Es buena la idea de implementar cámaras…”.
En contexto Ayer, la familia de José y Fernando Changoluisa ofreció una misa tras cumplirse un mes de las muertes. Las víctimas fueron asesinadas el 5 de febrero pasado dentro un autobús, en Amaguaña, por una banda de sacapintas. El sábado anterior, la Policía capturó a 6 sospechosos.