Los asesinatos violentos preocupan a los pobladores de Machala. Solo en mayo, la Unidad de Homicidios de la Fiscalía de El Oro (abierta hace un mes), conoció 17 casos.
La mayoría de denunciantes coincidió en que los responsables serían presuntos sicarios que operan en la provincia desde hace unos dos años. Aunque Víctor Hugo Villacís, jefe provincial de la Policía de El Oro, cree que las muertes responden a un “ajuste de cuentas”, entre personas con antecedentes penales.
La explicación del oficial no convence a todos los pobladores. Los deudos de cuatro taxistas que fueron asesinados entre marzo y mayo de este año, por ejemplo, dicen que se trata de minimizar el problema de la inseguridad en la provincia.
El pasado 15 de mayo un taxista fue asesinado dentro del vehículo, en las afueras de la urbe y no tenía cuentas pendientes con la Ley. “Estamos indefensos ante la delincuencia, necesitamos más control en las vías”, dijo Rodrigo Moreno, dirigente de la Federación Provincial de Taxis.
Él afirmó que el sicariato o asesinato por encargo en Machala no es nuevo. La población aún tiene presente la muerte de Hugo Quevedo, ex presidente del Congreso, ocurrida en enero del 2008. Entonces, un grupo de desconocidos que iban en dos motocicletas, abalearon a Quevedo cuanto se bajaba de su auto, frente al domicilio.
En el Comando General de la Policía se informó que se asignará más personal a El Oro para combatir la inseguridad.