La unión social es el pilar fundamental para erradicar la inseguridad en las ciudades. El deporte talvez es el instrumento más eficaz para obtener esa unión, pero muchas veces es manchado por problemas sociales, como el alcoholismo.
Este mal se ha apoderado de algunas ligas barriales y posteriormente esto ha ocasionado que la violencia avance y afecte a nuestras familias.
El Ministerio del Deporte y las Unidades de Policía Comunitaria debieran emprender una campaña permanente para eliminar la venta de bebidas alcohólicas en espacios deportivos.
La colaboración de estas entidades gubernamentales ayudaría a que la ciudadanía se integre y se organice para empezar a recuperar el espacio público, como forma de combatir la inseguridad. Muchos parques de nuestros barrios se han convertido en sitios peligrosos donde ocurren robos, asaltos y hasta otro tipo de delitos más graves.
La organización de los ciudadanos es el factor que debe impulsar a realizar un cambio en nuestros barrios para elaborar planes antidelincuenciales o instalar alarmas comunitarias. El trabajo en equipo de las autoridades con los ciudadanos ayudará a construir una sola fuerza y eso ayudará a contrarrestar la inseguridad y evitar que seamos víctimas de la delincuencia.