La angustia se apoderó de los familiares durante varias horas. Ayer, a las 10:00, una balacera ocurrida dentro del Centro de Rehabilitación Social de Varones N°1, conocido como Penitenciaría del Litoral, alarmó a los visitantes del reclusorio.
Tres reclusos perdieron la vida en el incidente. Héctor C., Jorge A., y Miguel P. habrían sido abatidos en el área de la cocina, aledaña al pabellón conocido como Renacimiento. Byron O., también interno, resultó herido en la riña y fue hospitalizado.
Laura M., familiar de unos de los privados de libertad, dijo haber escuchado los disparos -aunque no recordaba cuántos fueron-, perdió sus cabales en el momento en que la segunda ambulancia abandonaba la Penitenciaría, a las 10:50.
La mujer de 62 años volcó su ira contra la puerta trasera del automóvil, con dos golpes y un puntapié. Ella era una de las más de 250 visitantes que se hallaban en el centro penitenciario esperando noticias. Su indignación era no saber no saber si entre los heridos y muertos se encontraba uno de los suyos.
El nombre de las víctimas se conoció aproximadamente a las 15:00 luego de que el Ministerio de Justicia los hizo públicos en su cuenta de Twitter.
Laura se cubría del sol y buscaba un poco de agua para calmarse. Decía no entender el por qué se originó un incidente armado en el interior. Ella visitaba a su hijo en el área de Cuarentena cuando fue desalojada por elementos de élite de la Policía, que incurrieron en el sitio.
Este es el tercer incidente que se registra en la Penitenciaría en lo que va del año.
El pasado 17 de julio un interno fue hallado sin vida en el techo de uno de los pabellones.
Además, en abril pasado se registró un enfrentamiento entre internos. La riña se produjo, según la Policía, cuando varios reclusos eran trasladados hacia los nuevos pabellones que se construyen en el complejo penitenciario. El incidente dejó dos internos heridos.
Otro familiar, quien asistió al sitio para entregarle un pantalón a un pariente, buscaba información entre los uniformados que allí se encontraban resguardando los exteriores de la cárcel. Además, unidades de élite de la Policía permanecían en el interior . “Es inaceptable que se dé un tiroteo. Cuando traigo una prenda me complican a toda costa su ingreso”, comentó el familiar.
Hasta el mediodía salieron tres ambulancias del interior.
La Fiscalía inicio de una indagación previa por el hecho.