La Policía de Italia asegura que no se han establecido vínculos entre el Consulado del Ecuador en Milán y el hallazgo de 40 kilos de cocaína en la valija diplomática despachada en la Cancillería de Quito a la Oficina Comercial de esa misión exterior. Sin embargo, precisa que la investigación aún no ha concluido y que tampoco existe un plazo determinado para dar por cerrado el caso.
Uno de los agentes que investiga el hallazgo presentó más detalles sobre este tema y aseguró a este Diario que el 11 de enero, el alcaloide fue descubierto en el aeropuerto y que “nunca llegó a las oficinas del Consulado de Milán”. El policía aseguró que eso “sería una prueba evidente y la razón para no incautar objetos de esa misión diplomática, ni llamar a ningún empleado del Consulado a rendir la versión de los hechos”.
Documentos del courier TNT, contratado por Relaciones Exteriores para el traslado de valijas diplomáticas, señalan que el cargamento tenía como destino la Oficina Comercial, departamento al que estaba asignada María Auxiliadora Cárdenas.
Según documentos oficiales, a febrero esta funcionaria seguía en la nómina de Cancillería.
Este Diario cruzó datos con la base de la Secretaría Nacional de Ciencia y Tecnología (Senecyt) y allí se determina que de los 11 funcionarios asignados al consulado de Milán, siete de ellos no tienen registrado su título de educación superior en ese organismo y sus ingresos mensuales superan los USD 2 000 (ver tabulado).
El agente contactado por este Diario también señaló que entre los detenidos está un químico. Él es Jean Paul Flores. Una publicación del Diario La Repubblica de Milán señala que él tiene doble nacionalidad: ecuatoriana y estadounidense. Pero su presencia en el grupo de los detenidos podría ser clave para la elaboración de la droga líquida. Esto, porque -según el profesor de química analítica David Egas- “solo un químico podría formar las mezclas adecuadas para transportar los estupefacientes”.
El agente, quien ratificó que los 40 kilos corresponden a droga y no a los 80 jarrones que iban en la valija, también afirmó que los vasos contenían “una suerte de lámina”. El hallazgo precisamente se produjo cuando los investigadores rompieron esa protección (ver infografía).
¿Cómo se hizo el seguimiento del caso? Quien esperó el cargamento en el aeropuerto de Milán fue la fiscal Letizia Manella.
Esta judicial es la responsable del caso de la valija, que lleva más de dos meses en etapa de indagación. La Policía de Estado (Italia) aseguró conocer que el envío fue solicitado por Cristian Loor, el artista ecuatoriano y director de la obra Ruga la tortuga, que ahora es indagado por este hecho. Junto a él están detenidas otras seis personas. Entre ellas, el también ecuatoriano Jorge Redrobán. El 12 de octubre del año pasado, Loor apareció en una rueda de prensa junto a Cárdenas y en otras fotografías, Redrobán están con la cónsul Narcisa Soria.
En Ecuador, la etapa de indagación finalizará los últimos días de mayo. Pero en Italia, no se tiene una fecha fija, a pesar de que el canciller Ricardo Patiño aseguró el pasado jueves que esa etapa estaba por finalizar.
Otra revelación de los agentes: Loor solicitó y pagó el envío oficial. El investigador italiano dice que este detalle “hace creer que lo más probable es que la droga salió desde el Ecuador y no que se introdujo en el camino”.
Esta última posibilidad lo manejó inicialmente el Canciller, pues no descartó que en el transcurso del viaje se pudo introducir el alcaloide. En un inicio también dijo que eran dos escalas las que hizo la valija diplomática. No obstante, luego el embajador de Ecuador en Italia, Carlos Vallejo, dijo que eran tres: Guayaquil, España y Bélgica. No obstante, el 9 de febrero, cuando de forma sorpresiva se anunció el hecho, el canciller, Patiño se remitió a decir que “la Policía de Milán investiga y nos ha pedido reserva en el caso”. Ese día, el funcionario anunció que el 11 de enero agentes italianos hallaron cocaína camuflada en jarrones que iban a ser supuestamente usados en el montaje de Ruga la Tortuga, en Milán.
La indagación en Quito
El asambleísta de oposición Galo Lara envió un oficio al presidente Rafael Correa para que un grupo de la Secretaría Nacional de Transparencia se una a la investigación de la Fiscalía.
Otro oficio fue enviado a la Fiscalía General para que “se transparente el trabajo”.
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