Militares en retiro reclaman en Quito
Los ex combatientes del Cenepa llegaron con uniforme camuflaje y reclamaron en la Asamblea Nacional. Ocurrió la tarde de ayer, cuando el Pleno del organismo debatía sobre el veto parcial que el Ejecutivo interpuso a la Ley de Héroes y Heroínas.
La discusión se desarrolló en medio de incidentes en las afueras del Parlamento. La Escolta Legislativa, integrada por militares, usó bombas lacrimógenas.
Los uniformados trataba de evitar que los ex combatientes del Cenepa (militares en retiro) irrumpieran en la sesión.
Juan Llasha, sargento que combatió en Tiwintza, anunció que en la noche y madrugada de hoy llegarían a Quito más uniformados de Morona Santiago, Quevedo y Guayas. Él encabeza un grupo de más de 100 ex soldados que exigen que la Legislatura se ratifique en la Ley aprobada inicialmente.
Allí se contemplaban beneficios para los héroes. El 7 de agosto, la Asamblea aprobó las reformas a esta normativa. Lo hicieron con 97 votos a favor y una abstención.
En ese entonces, los asambleístas de diversas bancadas afirmaron que los beneficios para los ex combatientes deben ser iguales, independientemente del conflicto en el que participaron (Paquisha, Cenepa, etc).
Durante ese debate se pidió que se dé un tratamiento igual a los veteranos de guerra, para que accedan a formación, capacitación, inserción al sistema laboral formal e informal, becas para educación hasta el tercer nivel, atención gratuita y preferente en los hospitales de las Fuerzas Armadas y de la salud pública, etc.
Además de la exoneración del 50% en la entrada a actos públicos, servicios básicos, utilización de transporte terrestre, aéreo y marítimo, entre otros.
La noche de ayer, los ex militares superaron el cerco legislativo y llegaron a una de las puertas del edificio. En el Pleno, el debate tuvo contratiempos. Se conoció que la norma entraría en vigencia por el Ministerio de la Ley, el jueves.
Horas antes, el asambleísta de AP Fernando Bustamante dijo que el Ejecutivo clarificó quiénes son beneficiarios de la Ley.
Luego de que la normativa fuera aprobada en agosto, el presidente Rafael Correa eliminó la disposición que establecía que los ex combatientes que ya reciben remuneración o pensión del Estado, puedan acceder a un salario adicional equivalente al 0,5% de la remuneración básica.
“Estamos por cometer una injusticia”, dijo el asambleísta Paco Moncayo, quien defendió el pedido de los militares retirados. “Muchos no están empapados. La ley de gratitud de 1995 estableció 400 salarios mínimos unificados para fallecidos, 200 discapacidad permanente y 20 salarios, para todos”. E l asambleísta Ramiro Terán mocionó ratificar el texto inicial aprobado por la Asamblea, pero no obtuvo apoyo para su aprobación: hubo 51 votos afirmativos y 50 negativos.