Dennise despertó en el cuarto de un hotel en el sur de Quito. Estaba desnuda, llena de cicatrices, sin dinero ni documentos. Aún recuerda con ira la noche del 4 de diciembre del 2 010 cuando, junto a su novio, se subió a un taxi en La Mariscal, cerca de las 03:00.
“Nunca nos llevó a la casa”, dice con impotencia. El último recuerdo que tiene es que miró el reloj dentro del auto en el momento en que su novio se bajó en una licorería para comprar vino. “Lo vi bajarse, yo estaba un poco tomada, y cuando regresé a ver al conductor me sopló algo en la cara y arrancó. No recuerdo más”.
Su caso formó parte de los 16 dopajes con escopolamina que se registraron en Quito el año pasado, según cifras del Observatorio Metropolitano de Seguridad Ciudadana (OMSC). Al siguiente día, al bajar hasta la recepción del hotel, una mujer le dijo que había llegado abrazada de un hombre y aparentemente mareada. “Al parecer llegamos al lugar como pareja, pero antes me había llevado a un cajero para robarme dinero. Abusó de mí e incluso se llevó mi ropa; me cubrí con la sábana”.
Según un estudio del Instituto de Higiene Leopoldo Izquieta Pérez, la escopolamina ingresa al cuerpo por la piel; solo necesita un vehículo oleoso (aceite) que facilite la absorción. También puede llegar a la sangre por vía oral, respiratoria y la mucosa ocular.
Silvio Dávila, jefe de Inteligencia de la Policía Judicial de Pichincha, sostiene que los índices de secuestro exprés se han incrementado en Quito. “Las denuncias son mayores a las del año pasado en estas fechas y la modalidad es más frecuente en taxis”.
El oficial recomienda tener precaución al subirse a un vehículo de transporte. “Es mejor que la persona llame a la cooperativa, sobre todo si es mujer, aunque los hombres también corren riesgos, especialmente porque son vulnerables al consumir licor”.
En ese sentido, Henry Ochoa, coordinador nacional de Gestión de Riesgos de la Cruz Roja, señala que la mayor parte de emergencias que atiende la central en fiestas de Quito es por el consumo excesivo de bebidas alcohólicas.
“Hay tres hechos que se registran más en esta temporada: violencia civil (asaltos y riñas), accidentes de tránsito y emergencias clínicas”, informa Ochoa. El socorrista dice que las atenciones también se incrementan en la celebración a la ciudad: pasan de 35 diarias a un promedio de 110.
Según un estudio realizado por el OMSC sobre la violencia en fiestas de Quito, entre el 2006 y el 2010, el 31% de incidentes tuvo como causa la riña y el 22% el robo y asalto. Agrega que la mayoría ocurrió en la madrugada, con un 39%; en la noche 29% ; en la tarde 27%; y en la mañana 5% .
El portavoz de la Cruz Roja refiere que hay accidentes de tránsito en donde han muerto personas por irresponsabilidad de otras que conducían en estado etílico.
Katherine D. falleció junto con su madre y su tía el 3 de diciembre del año pasado. Un vehículo se impactó contra el suyo al atravesar la av. Galo Plaza, cuando salía de una fiesta. El primer automóvil no se detuvo con la luz roja en la intersección de la calle Ramón Borja, norte de Quito.
El conductor del otro vehículo fue llevado a la Policía y los resultados de los exámenes revelaron que en su sangre había 1,2 grados de alcohol. El límite permitido es 0,03 grados, según la ley.
La Cruz Roja (teléfono 131) y el Cuerpo de Bomberos (911 ó 102) atienden emergencias en la ciudad durante las 24 horas. Sin embargo, hay sitios como el parque La Carolina y el Centro Histórico en donde se registran más incidentes, sobre todo después de espectáculos públicos. “El 4 y 5 de diciembre hay conciertos y aglomeraciones de gente por fiestas en la calle, ahí se producen más riñas y asaltos”, dice Ochoa.
Para reducir la violencia en las fiestas de este año, la Alcaldía reformó la normativa municipal para prohibir el consumo de licor en los espacios públicos. Quienes sean hallados bebiendo alcohol serán sancionados con USD 136. Asimismo, 6 300 policías nacionales y metropolitanos dan seguridad. El Ministerio del Interior informó que se sumarán 1 100 aspirantes a policías.
Los uniformados estarán repartidos en ferias, conciertos, desfiles y otros actos. Las unidades de Policía Comunitaria realizarán patrullajes antidelictivos en barrios.
Juan Carlos Rueda, comandante del Distrito Metropolitano, informa de otra modalidad de robo que ha sido detectada: personas fingen sufrir un ataque epiléptico y se tiran al piso. Cuando alguien va a socorrerla, otras personas llegan por detrás y le roban.
Tenga en cuenta
La Cruz Roja recomienda no consumir licor. No opere maquinaria ni conduzca en estado etílico. En las fiestas de Quito 2010 hubo 143 accidentes de tránsito.
Tenga cuidado en espacios públicos. Vaya acompañado y sin objetos de valor. Circule por calles iluminadas. Camine atento; las personas deprimidas o distraídas son vulnerables a robos.
Cuide a los niños. Lo recomendable es no llevar niños a lugares de alta concurrencia. Acuerde con ellos un lugar de encuentro en caso de separarse.