JORGE MENESES
Dirigente de Barrios del Sur de Guayaquil
Por el miedo a la delincuencia, en nuestros sectores la gente ha empezado a encerrarse. Los vecinos evitan salir por las noches y eso ha cambiado la forma en la que antes interactuábamos en los vecindarios. No se puede salir a conversar en los parques, ni siquiera en los portones de nuestras casas por el miedo a los extraños.
En otras zonas, los barrios prefieren cercarse, como si fueran fortalezas. Eso es lamentable porque sentimos que estamos perdiendo la batalla contra la delincuencia. Simplemente nos están ganando.
Por ello, la propuesta que hacemos es que empecemos a exigir más acción, de parte de las autoridades, de la Policía y mayor organización entre la población. Por ejemplo, apoyándonos cuando una persona sospechosa es vista donde vivimos. También alertando a la Policía cuando observemos actitudes extrañas. No se trata tampoco de caer en la paranoia, pero sí estar alertas.
Hay que fomentar la cooperación entre los vecinos y entre los sectores. Eso solo se consigue con el diálogo, manteniendo reuniones regulares, para conocer qué está sucediendo en el lugar donde vivimos.