José Luis Mogrovejo había perdido los 30 puntos de su licencia (tipo E) y debía otros 45. Registraba seis contravenciones, según el mayor Juan Zapata, vocero de la Dirección Nacional de Tránsito DNT).
Pese a ello, seguía conduciendo la unidad de placas AAW-510, de la cooperativa Turismo Oriental, que se accidentó anteayer en el sector de Panzaleo, Cotopaxi.
Según la DNT, los puntos no le fueron reducidos (en la práctica) porque sus contravenciones no se tramitaron en los juzgados.
Los jueces dicen que faltan personal y juzgados. En este año, la Policía de Tránsito ha emitido 7 762 contravenciones, pero solo han sido juzgadas 1 603.
Antes, el trámite estaba en manos de la Policía, pero desde el 7 de agosto del 2008, cuando se aprobó la Ley de Tránsito, pasó a los juzgados.
Ayer, Javier Valdiviezo, director nacional de Tránsito, presentó un informe preliminar sobre el percance. Dijo que la posible causa fue una falla humana.
En la vía no se hallaron las líneas negras que normalmente dejan las llantas de un bus, cuando frena súbitamente. Lo que “hace pensar que el chofer no frenó al ingresar a la curva y se fue de largo”. Además, la unidad iba a 50 km/h cuando chocó contra la guardavalla de la vía.
“Esa guardavalla no cumplió su función”, afirmó Valdiviezo. “Debía absorber la fuerza del choque y hacer que el bus rebotara hacia la vía, pero esta se dobló”.
En lo que va del año, en el país se registraron 9 194 accidentes de tránsito. 4 584 fueron provocados por la imprudencia del conductor; 1 292, por exceso de velocidad y 1 071 por conducir en estado de embriaguez.
La Policía hizo un llamado para que, junto con la Comisión Nacional de Tránsito, se elabore un reglamento que ponga límites a las horas de conducir.
Mogrovejo salió de Cuenca a las 20:00 y estuvo casi ocho horas manejando. “Lo recomendable son tres horas y tomar un descanso”, dijo Valdiviezo “También asignar un conductor alterno. Sabemos que el bus lo tenía, pero aún no lo hemos identificado”.
Además, la Policía pidió a la Fiscalía que abriera una indagación para determinar responsables.
El titular de la institución, Washington Pesántez, dijo que el caso será conocido por el fiscal provincial de Tungurahua.
“La Ley establece que al fallecer el conductor del vehículo se extingue la causa, pero la Fiscalía direccionará sus investigaciones a la Cooperativa de Turismo Oriental”, afirmó el Fiscal.
También contra las correspondientes autoridades de Tránsito, “que permitieron que este automotor circulara”.
Según el director de la Corporación Municipal Cuencaire, Rolando Arpi, el bus de placas AAW-510 tenía pendiente la revisión vehicular del primer semestre de este año. Estos buses deben pasar dos chequeos al año.
La última revisión de unidad fue el 2 de diciembre del 2009. Un día antes (1 de diciembre) este bus no pasó el control de Cuencaire, porque tenía problemas en sus frenos. “Luego hizo las reparaciones y pasó”, dijo Arpi.
La Policía no se explica cómo pasó la revisión, si el día del accidente las llantas estaban lisas. En lo que va del año, la Policía emitió 2 457 infracciones por neumáticos lisos en el país. Según la Ley de Tránsito, por esta falta no se puede detener al chofer. La Policía solo puede emitir la papeleta.
En la Asamblea Nacional se discute una reforma a la Ley. El 11 de septiembre vence el plazo para la entrega del informe.
EL DEBATE EN LA WEB:
Participe en el foro
Ingrese a www.elcomercio.com y participe en el foro sobre este tema. Ayer, más de 2 000 personas visitaron este espacio. A continuación algunos de los comentarios:
Diego Batallas
El mismo alboroto causó el accidente de Papallacta en el que murió un número similar de personas. Al mes todo el mundo se olvidó de lo ocurrido.
Eduardo Ludeña
Yo fui conductor de transporte interprovincial. Lo que sucede es que el chofer salió solo de Cuenca a Quito, cuando deben ir dos choferes. Posiblemente el dueño del bus quiso economizar el pago de un chofer más y no midió las consecuencias trágicas de ello.
Luis Ramírez
Yo creo que en esta situación los responsables son aquellos que hacen las leyes y también aquellos que debe hacer cumplir esas leyes.
Héctor Santamaría
Esta tragedia debe ser el inicio de una gran cambio, un cambio de actitud tanto de las autoridades de transporte terrestre, así como de los conductores y de los usuarios.
Wilson Guayanlema
No solo es la fatiga del chofer. Los conductores tienen el defecto de ir ‘volando’. Yo viajo desde Alausí hasta Riobamba y esa ruta causa vértigo.