El portal web del Consejo de la Judicatura recibió las postulaciones de 666 personas para conformar la nueva Corte Nacional de Justicia. La convocatoria para elegir a los 21 magistrados cerró ayer, a las 24:00.
La fase de postulación se inició desde el viernes 26 de agosto. Los aspirantes debieron llenar su inscripción en siete pasos que incluyeron sus datos personales e información profesional. También adjuntaron certificados de trabajo, cédula, papeleta de votación y una declaración juramentada de inhabilidades y patrimonio.
El Consejo de la Judicatura Transitorio (CJT), conformado por Paulo Rodríguez, Tania Arias y Fernando Yávar, decidieron que la declaración esté notarizada o cuente con una firma virtual autorizada por el Banco Central. El propósito era que con ella se garantice que el aspirante no adeude más de dos pensiones alimenticias, de ser el caso, y no tener ninguna inhabilidad para participar en el proceso.
Las inhabilidades estuvieron basadas en el capítulo II, del título II de la Ley Orgánica de Servicio Público. En la convocatoria también constó la remuneración mensual unificada que recibirán quienes sean escogidos como jueces o juezas será de USD 5 808.
El sistema cero papeles evitó que los postulantes presenten una carpeta con todos los documentos de respaldo de sus estudios y lugares de trabajo.
El movimiento en la Corte Nacional y en el Consejo de la Judicatura fue leve durante esta fase del concurso. Pocas personas se acercaron a las ventanillas para preguntar sobre los requisitos y sobre la postulación. El personal de esas dependencias les informó que el proceso se realizó a través de la Internet y que incluso los requisitos y la convocatoria estaban publicados en el sistema.
Ayer, durante todo el día, atendió normalmente la Notaría número 8 de Quito y la número 21 en Guayaquil. Eso se realizó con el fin de que los postulantes que requerían notarizar sus declaraciones pudieran hacerlo en el último día. Precisamente ese fue uno de los inconvenientes que tuvo el proceso, pues muchos de los candidatos no conocían que era indispensable la notarización de ese documento.
Para aspirar a la magistratura, el CJT solicitó que el postulantes sea ecuatoriano y se halle en pleno ejercicio de los derechos. Era necesario tener título de tercer nivel en Derecho legalmente reconocido y que haya ejercido la abogacía, la judicatura o la docencia universitaria por un mínimo de 10 años. Antes se pedía 15 años de experiencia.
Estaba previsto que a las 24:00 se cierre la postulación y comience la etapa de verificación de las carpetas. Paulo Rodríguez, presidente del CJT, dijo en entrevista para este Diario que hasta el 14 de septiembre constatarán los requisitos básicos de los postulantes. A parte de analizar la declaración juramentada se observarán las cuentas bancarias y se revisarán las contribuciones al IESS que deben acreditar los años de experiencia profesional.
Luego de este proceso se iniciará la Fase 2 (de Méritos) que será calificada con 30 puntos y en la que se evaluará la experiencia laboral general (haber ejercido con probidad notoria) y la experiencia laboral específica (calidad de intervención profesional y evaluaciones del desempeño). Allí también se estudiará la educación formal adicional, capacitaciones y publicaciones.
70 puntos más, del total de 100 en que los seleccionados serán calificados, dependerá de los resultados de la Fase 3 (de Oposición). En esta habrá pruebas teóricas sobre 30 puntos, prácticas (30 pts.) y una evaluación en una audiencia pública (10 pts).
Según el capítulo V del Instructivo General de Concursos del Consejo de la Judicatura, con los resultados definitivos, luego de la Fase de Oposición, el Director general del organismo presentará un informe. Los candidatos conocerán sus calificaciones, podrán impugnarlas si es el caso y solicitar una revisión. El CJT también planteó una duración para esta etapa antes de seleccionar a los magistrados definitivamente.
Las veedurías ciudadanas deberán estar presentes para vigilar la transparencia del proceso de selección para magistrados.