El Municipio empezó el proceso de revisión técnica vehicular con tecnología de punta. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
Cuatro guardias metropolitanos e igual número de empleados civiles controlaban el ingreso de vehículos al Centro de Revisión Vehicular Norte, ahora en manos del Municipio de Guayaquil.
Allí y en los centros del km 7 de la vía a Daule y de la av. 25 de Julio, en el sur, se inició ayer, 1 de julio, el nuevo proceso de revisión técnica, luego del traspaso de la competencia de matriculación a la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM).
Al llegar a las dependencias del norte, en la av. Benjamín Rosales, frente a la terminal terrestre, llamó la atención la ausencia de aglomeración de vehículos en los exteriores, así como de vendedores de accesorios y de quienes se ofrecían a realizar reparaciones de todo tipo previo a la revisión.
En los parqueos había suficiente espacio para albergar a los usuarios. Hasta hace una semana, el proceso estuvo a cargo de la Comisión de Tránsito del Ecuador. Junio se caracterizó con largas colas de vehículos apostados a lo largo de la autopista Santa Narcisa de Jesús.
Muchos conductores pernoctaban en el sitio, como ha ocurrido en los últimos días en cantones como Milagro y Daule, a donde los dueños de vehículos en Guayaquil viajaron para evitar el nuevo mecanismo de revisión.
Ahora bajo el manejo municipal, a través del servicio privado de la empresa Consorcio SGS, la revisión se efectúa previa cita. A través de la web www.sgsrevisionestecnicas.ec o al teléfono 370 4151, los usuarios agendan el día y la hora que concurrirán, luego de consultar los valores a pagar.
En el caso de ese centro, el primer usuario agendado fue Geovanny Franco Murillo. Sin embargo, el primer carro en ingresar a una de las 16 líneas de atención fue el de Norma L., un Nissan Verde placas GJT-0825. “Estoy un poco nerviosa porque es un sistema nuevo, pero está bien. Me parece que la revisión es muy ágil”.
Pero fue Martha Medina, propietaria de un auto Volkswagen rojo placas GSF-2975, la primera en retirarse con sus documentos en mano y el adhesivo en su parabrisas. “Desde que llegué pasó hora y media. Parece que había problemas de conexión con la base de datos, pero esperé cómoda en una sala con aire acondicionado. Este sistema es mucho mejor”.
En efecto Andrés Roche, gerente de la ATM, confirmó que el proceso de revisión se inició con problemas de conexión con la base de datos de la Agencia Nacional de Tránsito (ANT). “Hemos comenzado a interactuar en tiempo real con una base nacional. Antes era solo como prueba, pero ahora había que configurar los IP de los computadores nuestros y allí nos encontramos con pequeños inconvenientes”.
En la primera hora y media de atención se habían revisado 22 automotores. A las 16 líneas de atención del norte se suman siete en la vía a Daule y cinco en la av. 25 de Julio. En este último punto se atiende la revisión de vehículos pesados, transporte público, taxis y expresos escolares, los que deben cumplir el proceso dos veces al año. Cada centro puede atender a 1 500 vehículos diarios.
Pero Roche no solo aclaró que el tiempo promedio de atención por cada vehículo no debe exceder los 30 minutos. También que la Municipalidad no ha creado ni ha aumentado tasa alguna. Son las mismas tarifas que se cobran en Quito y Cuenca, donde la revisión también es técnica.
“En el 2013 la CTE cobraba la revisión dentro del valor de la matrícula. En ese entonces el valor era de USD 16 y ahora es de USD 25 en base a un tarifario nacional”, acotó.
En el caso de Guayaquil, el pago de la tasa de revisión se debe hacer en el Banco del Pacífico. En las próximas semanas se incorporará a otras entidades bancarias.
Durante la jornada llegaron más automotores de manera ordenada. “Temo no pasar de pronto alguna de las pruebas”, dijo un usuario.
El Gerente de la ATM enfatiza que a lo que hay que temer es a circular en un carro que no brinde las seguridades al conductor, su familia y a la comunidad. “Hoy se inicia un servicio moderno, con tecnología de punta que va a dejar atrás ese servicio oprobioso que recibían antes los usuarios”.
Al llegar al sitio, un empleado de SGS recibe el automotor, levanta un acta de las condiciones del mismo y luego lo ingresa al proceso de revisión.
En contexto
El 23 de mayo del 2014, en la Resolución 062, la Agencia Nacional de Tránsito reformó el tarifario de revisión técnica vehicular. En el caso de los autos livianos subió a USD 26,58; taxis y busetas a USD 18,19; pesados a USD 41,81; buses a USD 35,17; y, motos a USD 15,86.