República Centroafricana, un país azotado por la pobreza y la crisis sanitaria

Hospital de Médicos Sin Fronteras en el complejo de la ONU, en Malakal, Sudán del Sur. Foto: Cortesía Médicos Sin Fronteras

Hospital de Médicos Sin Fronteras en el complejo de la ONU, en Malakal, Sudán del Sur. Foto: Cortesía Médicos Sin Fronteras

Hospital de Médicos Sin Fronteras en el complejo de la ONU, en Malakal, Sudán del Sur. Foto: Cortesía Médicos Sin Fronteras

Este 25 de noviembre, el papa Francisco llegó a Kenia en su primera visita a África, un difícil viaje por la paz y la reconciliación que también lo llevará a Uganda y el fin de semana a República Centroafricana. Este último es un país en el que predomina la inseguridad y que atraviesa una de las mayores crisis humanitarias en el mundo, según la organización Médicos Sin Fronteras (MSF).

Con más de cuatro millones de habitantes, la República Centroafricana es uno de los países más pobres del mundo. La situación sanitaria del país es catastrófica: el conflicto y el desplazamiento impiden que la población reciba la atención médica que necesita, afirma un comunicado de MSF.

La organización médico-humanitaria afirma que el 72% de los hospitales y centros de salud del país están destruidos o dañados. Como resultado, muchas personas mueren por enfermedades fácilmente prevenibles y tratables, como la malaria, las infecciones respiratorias o las enfermedades diarreicas.

En la actualidad, Médicos Sin Fronteras cuenta con más de
2 600 trabajadores en el país, ha realizado 1 401 800 consultas externas y 13 400 intervenciones quirúrgicas a lo largo del último año.

Otro de los problemas del país, que cita la organización, es la carestía de personal cualificado. Por otro lado, el acceso a la salud es limitado y costoso, las vacunas escasean y el suministro de medicamentos a menudo se interrumpe, según MSF.

En su paso por la República Centroafricana, el 29 de noviembre, el papa Francisco visitará un campamento de refugiados y a víctimas de la guerra civil, y abrirá la Puerta Santa de la Catedral de Bangui, un acto que servirá de anticipo al Jubileo Extraordinario de la Misericordia, que comenzará el 8 de diciembre.

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